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La guerra en León cobra cada vez más víctimas en medios de la censura. Foto: Cuauhtémoc Villegas Durán.
La guerra en León cobra cada vez más víctimas en medios de la censura. Foto: Cuauhtémoc Villegas Durán.

Objetivo7/Cuauhtémoc Villegas Durán/Enviado especial

León, Guanajuato.- El lunes 6 agosto asesinaron a un fotoreportero de esta ciudad y la noticia fue nacional e internacional mientras, que, si se trata de un narco, un policía o cualquier ciudadano, los medios no informan por amenazas del narco y la censura que ejerce el Estado pero las personas se alertan en el portal de Facebook Noticias León Guanajuato o en Noticias León 100% libres.

Cuando las ejecuciones y los constantes combates se dan, la prensa calla pero los ciudadanos se alertan subiendo notas y vídeos para informarse entre si, y así, evitar pasar por las zonas en conflicto aunque minutos u horas después el Estado y los narcos se encargan de “bajar” -censurar- las noticias de “los ciudadanos” -como reza el subtitulo de las páginas de Facebook- pero ya para entonces, la gente sabe lo que los medios callan.

En esta ciudad, una de la mejores escuelas del periodismo por diarios como el AM, el toque de queda es a las nueve de la noche, la bulliciosa ciudad de los zapatos y los artículos de piel, desde los piquerillos a las transnacionales que exportan, las cebadillas y los cientos de hoteles que pueblas la zona de la piel y el centro histórico, se convierte en una ciudad oscura y sin habitantes, una urbe fantasma para evitar ser víctimas de la delincuencia común o para evitar ver o ser muertos por alguna bala perdida de los constantes enfrentamientos armados y las ejecuciones y los intentos de asesinato como el de ayer 8 de agosto en una glorieta de la ciudad, cuando un auto recibió 11 disparos sin que los 2 ocupantes resultaran heridos.

Mientras tanto, la policía sigue abusando de los ciudadanos comunes y los narcos y judiciales se pasean con sus armas en Plaza Mayor ubicada en Zona Dorada de la ciudad, donde se han dado enfrentamientos y ejecuciones y donde, los policías se esconden en los recovecos para evitar que los maten en las constantes conflagraciones que se dan en la ciudad o para que no los ejecuten por sus ligas con el narco que se pasea frente a ellos en las plazas, calles, avenidas y lugares públicos sin que se atrevan a hacerles nada.