La Voz de Galicia/ADN.- Las autoridades mexicanas revelaron hoy que Mario Núñez Meza, presunto miembro del cártel de Sinaloa detenido el miércoles en Ciudad Juárez, está implicado en el «homicidio de más de 350 personas» halladas en fosas clandestinas en Durango, entre otros delitos.

El portavoz el gabinete de seguridad, Eduardo Sánchez, dijo en rueda de prensa que Núñez Meza, alias el «M10», es uno de los 122 delincuentes considerados «objetivos relevantes» por el actual Gobierno y que en este momento ya está declarando ante la fiscalía general.

Explicó que su detención se produjo en una operación «bien planeada» y en la que no se produjeron disparos, gracias a una denuncia ciudadana y a información de inteligencia de los cuerpos de seguridad.

Sánchez indicó que el presunto integrante del cártel de las drogas encabezado por Joaquín «el Chapo» Guzmán está relacionado con al menos 30 investigaciones por diversos delitos, por lo que «puede enfrentarse a una pena de más de 40 años de prisión».

Destacó que «es presunto responsable del homicidio de más de 350 personas halladas en 23 fosas clandestinas en el estado de Durango», en el noroeste de México.
Además, está vinculado con el asesinato de dos agentes del Ministerio Público federal en 2010 en Durango y de tres miembros de la fiscalía del norteño estado de Chihuahua en Ciudad Camargo en septiembre de 2012.

El portavoz de seguridad precisó que en el estado de Texas (EEUU) «existe una orden de captura» contra Núñez Meza por delitos que no precisó, pero aclaró que hasta ahora el Gobierno mexicano no ha recibido una solicitud de extradición de ese país.

Señaló que durante la operación, en la que «resultó fundamental» el trabajo de la fiscalía estatal, fueron incautados varios objetos, entre ellos una ametralladora, varios cartuchos, un ordenador y cuatro teléfonos móviles.

En México operan al menos seis grandes grupos de narcotraficantes, de los cuales el cártel del Pacífico o de Sinaloa es el más poderoso, según las agencias de inteligencia, y sus operaciones van más allá de las fronteras mexicanas.

Las autoridades mexicanas revelaron hoy que Mario Núñez Meza, presunto miembro del cártel de Sinaloa detenido el miércoles en Ciudad Juárez, está implicado en el «homicidio de más de 350 personas» halladas en fosas clandestinas en Durango, entre otros delitos.

El portavoz el gabinete de seguridad, Eduardo Sánchez, dijo en rueda de prensa que Núñez Meza, alias el «M10», es uno de los 122 delincuentes considerados «objetivos relevantes» por el actual Gobierno y que en este momento ya está declarando ante la fiscalía general.

Explicó que su detención se produjo en una operación «bien planeada» y en la que no se produjeron disparos, gracias a una denuncia ciudadana y a información de inteligencia de los cuerpos de seguridad.

Sánchez indicó que el presunto integrante del cártel de las drogas encabezado por Joaquín «el Chapo» Guzmán está relacionado con al menos 30 investigaciones por diversos delitos, por lo que «puede enfrentarse a una pena de más de 40 años de prisión».

Destacó que «es presunto responsable del homicidio de más de 350 personas halladas en 23 fosas clandestinas en el estado de Durango», en el noroeste de México.
Además, está vinculado con el asesinato de dos agentes del Ministerio Público federal en 2010 en Durango y de tres miembros de la fiscalía del norteño estado de Chihuahua en Ciudad Camargo en septiembre de 2012.

El portavoz de seguridad precisó que en el estado de Texas (EEUU) «existe una orden de captura» contra Núñez Meza por delitos que no precisó, pero aclaró que hasta ahora el Gobierno mexicano no ha recibido una solicitud de extradición de ese país.
Señaló que durante la operación, en la que «resultó fundamental» el trabajo de la fiscalía estatal, fueron incautados varios objetos, entre ellos una ametralladora, varios cartuchos, un ordenador y cuatro teléfonos móviles.

En México operan al menos seis grandes grupos de narcotraficantes, de los cuales el cártel del Pacífico o de Sinaloa es el más poderoso, según las agencias de inteligencia, y sus operaciones van más allá de las fronteras mexicanas.