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beto romero.jpgBeto Romero de Televisa. Foto: Linkedin.

Objetivo7/Cuauhtémoc Villegas Durán

Aunque asegura estar “más fuerte que nunca”, el empresario José Luis Morales, ha perdido a una de sus cartas fuertes, el conductor de Infolínea vespertino, Alberto Romero Garza.

Romero Garza fue apadrinado por Luis Armando Reynoso Femat y nunca lo ha negado, incluso, cuando dejó la televisión del estado, entonces Canal 6 para irse a Televisa donde aún trabaja, pidió el consentimiento del polémico ex gobernador.

Beto Romero como le dicen sus múltiples “amigos” de los medios y la política, ha incursionado en los medios electrónicos con su portal Centuria que cuenta con múltiples apoyos por la posición de Romero en Televisa y en Infolínea.

En Aguascalientes se ha dado una tendencia de que reporteros y fotógrafos usen su posición en sus medios o su apellido para fundar medios electrónicos acrecentando y oficializando el chayote: existen por lo menos unos 200 medios sostenidos por la clase política local, muchos de ellos sin dar cuentas a Hacienda reciben en conjunto millones de pesos anualmente.

Alberto Romero justificaba hace algunos años su falta de preparación para hacer reportajes de investigación con una presunta falta de recursos económicos. Esto lo dijo en un programa de la televisora del estado con periodistas oficialistas. Televisa recibía entonces 10 millones anuales más otros diez millones ilegales con pagos dobles que le hacía su padrino Luis Armando como documentó Objetivo7 impreso. 20 millones sólo de gobierno del estado sin contar lo que le daba el municipio y otros clientes. Y no tenían dinero para hacer un solo reportaje al año, no se diga al mes o diariamente.

Antes de Objetivo7 sólo La Verdad del Centro hacía periodismo de investigación en este estado. Ambos, José Luis Morales y Alberto Romero tienen una formación “aldeana” como escribió Otto Granados cuando lo atacó con información obtenida desde los pasillos del poder pero que presenta “periodísticamente” y tratandolo de enfermo mental, como si su padrino político Carlos Salinas de Gortari y él mismo, no estuvieran enfermos por el poder al grado imponer un sistema neoliberal y genocida manejando “la democracia” a su antojo y robando elecciones cada seis años a costa de la vida de cientos de miles de mexicanos. La enfermedad se llama hubris.

José Luis Morales dijo que buscará reporteros “de barrio” cercanos a la gente y alejados del poder en clara referencia a qué, como a todo conductor de Televisa, toda la clase política le rinde pleitesía y todos son supuestamente sus “amigos”. Yo he visto como a conductores de Televisa los reciben los políticos con maletines llenos de billetes de cien dólares para sus vicios y sus prostitutos: lo mismo en un bello puerto como Vallarta o Cancún que en un prostíbulo de la Ciudad de México.