Según la Wikipedia La Jornada Aguascalientes es la única franquicia de ese diario de derecha.
Es un periódico que al igual que todos los del estado se vende, pero muy caro y por eso se consideran así mismos, semidioses del periodismo.
No lo son, son unos mantenidos por el gobierno del estado, los gobiernos municipales y los diputados, sino, que hagan sus cuentas públicas, pero se venden muy caro por el nombre de un periódico en que el director de Objetivo7 se formó y formó, pero no con estos hombrecillos de franquicia y padrinos políticos, sino con los gigantes del periodismo mexicano como Carlos Payán Velver y Pedro Valtierra, hombres que sí están a nuestra altura y no malandrines de rancho, sicarios de caciques y nazis.
Cuando Objetivo7 fue perseguido por darle la de ocho columnas a ese “periódico” tras la ejecución de sobrinos del procurador aunque la persecución nunca fue contra La Jornada por publicar a 8 columnas las respuestas a las preguntas que hiciera Objetivo7, lo que causó la criminalización de quien esto escribe, porque en Aguascalientes preguntar es un delito.
Nunca, ni medios ni Estado probaron sus mentiras y calumnias y la Jornada Aguascalientes calló la persecución contra un medio de comunicación por modesto que sea, demostrando que sus “periodistas” son tan indolentes y mediocres como el más pasquinero de este país. Todo era tan fácil como preguntar a los implicados, pero ni siquiera saben preguntar… siempre se han valido de Objetivo7 para ser mejores porque quisieran haberse formado en los diarios y no en las oficinas de prensa, lamiendo botas… como lo siguen haciendo con aquellos que los mantienen con el dinero del pueblo… Por cierto, quien esto escribe se disculpó con los normalistas y si no nos dejamos del gobernador que mantiene a La Jornada tampoco nos dejaremos del sicario que la encabeza y que ni siquiera tiene el valor de firmar lo que escribe. Ese mismo gobernador que los mantiene es el que Objetivo7 denunció por favorecer a un narcoempresario con el casino y que también favorece a ese diario… Y si el gobernador resulta implicado “tanto peca el que mata a la vaca como el que le detiene la pata” y La Jornada habría entonces recibido dinero lleno de sangre. Mucho dinero lleno de sangre. Millones de pesos ensangrentados. Al tiempo.
Nosotros no negamos lo que somos y como humanos somos imperfectos pero jamás plagiadores como el seudointelectual que dirige La Jornada y a quien su misma colaboradora Nora Ruvalcaba, ha denunciado como un ladrón y “hombre de letrinas”.
Objetivo7 sólo ha hecho lo que todos los demás medios no han hecho en toda la historia de Aguascalientes: revolucionar el periodismo y lo más importante decir la verdad aunque sea a mentadas de madre como ayer porque no nos impresionan los serviles del neoliberalismo ni que traguen champaña en las “letrinas” del poder…