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Ciudad de México, 5 de junio (SinEmbargo).– Ocho estudiantes de la Universidad Veracruzana fueron agredidos con armas largas, machetes, palos y bates por un grupo de 10 personas que irrumpió en una fiesta que realizaban los jóvenes en la capital del estado.

Julián Ramírez, estudiante del área de humanidades de la Universidad, informó a la prensa que los hechos ocurrieron en la madrugada de este viernes. “Era un grupo de personas encapuchados, que portaban chalecos tácticos policiales, con bates , bastones y armas largas”, explicó.

El joven responsabilizó de estas agresiones al gobierno de Javier Duarte de Ochoa y a las autoridades locales. “Hacemos responsables a todas las instancias del gobierno de éste y cualquier otro ataque hacia los compañeros y cualquier otro joven”, dijo Ramírez.

De acuerdo con la prensa local, hay tres jóvenes que se reportan graves. Algunos presentan machetazos en la cara, heridas de arma, fracturas en craneo, así como en brazos y otras partes del cuerpo, dislocación de mandíbulas y pérdida total de dientes.

Julián Ramírez dijo que los jóvenes no pueden dar su aprobación para la divulgación de sus nombres debido a la gravedad de sus lesiones, mientras que otros están aterrados o en shock.

Explicó que después de que sus compañeros fueran golpeados “salvajemente” los agresores se llevaron sus celulares y sus computadoras portátiles. Dijo que durante la agresión les hicieron advertencias, aunque no precisó de qué tipo.

De acuerdo con el perfil de Facebook del Comité Universitario de Lucha de la Universidad Veracruzana al lugar de los hechos acudieron autoridades que abandonaron a los jóvenes ignorando su llamado de auxilio:

“Cinco minutos después de su huida [de los agresores], llegaron patrullas a fotografiar a los heridos, algunos de gravedad, y con fracturas craneales, para que, al arribar sujetos de civil en un pontiac blanco recibieran la orden de irse del lugar, por lo que dejaron a los estudiantes en las banquetas y otros dentro del domicilio que fue forzado ante los gritos de ‘ayuda’ y ‘no nos dejen, nos van a matar’”.