La naquiza, en su ambiente.
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Aguascalientes, México.- El mandado a la chingada fue él, Martín Orozco Sandoval quien se enfrenta a diario con el presidente solo para llevarle la contra aunque ni siquiera puede con los dueños de antros,bares y cantinas que a pesar de el decreto del gobernador se negaron a cerrar y este se los permitió y los va dejar hacer lo que quieran.

Ante la crisis hospitalaria que ya dejó sin servicios de salud y de emergencia a los aguascalentenses, Martín, “el gobernador naco” decretó el cierre de bares pero lo mandaron “a la chingada”.