Aguascalientes, Ags.- El ex gobernador de Aguascalientes, acusado de la delito de peculado, no solo tiene la bendición y protección del obispo del Aguascalientes, José María de la Torre, sino también dice estar amparado por el mismísimo Dios.
Lo anterior lo expresó ayer cuando se presentó a declarar en la procuradoría de justicia del estado, frívolo, se dijo contrariado por la derrota de la selección nacional y pidió a los reporteros no ser “morbosos ni metiches”.