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mina-el-gallo-5El pasado martes 7 de abril, un grupo de hombres armados se introdujeron a la mina Pangea en Mocorito y consumaron el más grande atraco al sector minero en la historia de México: robaron siete mil onzas de oro, plata y cobre con valor aproximado de 126 millones de pesos. La versión de las autoridades estatales es que fue un robo “hormiga”. Pero la propia compañía minera, en voz del presidente de la empresa, Rob McEwen, lo desmiente. Y más aún, admite que llevan una buena relación con las organizaciones criminales de la zona de Sinaloa, y hasta piden permiso cuando es necesaria alguna exploración. El gobernador Mario López Valdez respondió que ignoraba que los inversionistas mineros pidiesen permiso a grupos criminales para la exploración de yacimientos.

MOCORITO.- La versión que dio el Secretario de Gobierno en Sinaloa Gerardo Vargas Landeros de que el robo en la planta El Gallo 1 de la Mina Pangea, del corporativo McEven Mining, fue un hecho que se dio desde días atrás como robo “hormiga”, fue desmentido por el personal de la compañía minera.

Representantes de la empresa revelaron que el sistema de seguridad de la mina es estricto y en ningún momento, desde que reinició labores la mina en el 2013, han detectado faltantes en la producción.

Ante esto, el mismo alcalde de Mocorito, José Eleno Quiñónez López, comentó que este tipo de hechos delictivos ponen mal parado al municipio, ya que la empresa minera es una compañía trasnacional que genera empleos en la región del Évora.

El Presidente Municipal expresó que ya giró las órdenes al cuerpo de Seguridad Pública para que se coordine con los demás cuerpos policiacos en las investigaciones, aunque reconoció que hasta el miércoles por la tarde no se tiene un reporte oficial de parte de la Mina.

“Ojalá que esto se solucione y se esclarezca por el bien de la minera y por el bien de la gente y de Mocorito, ya que es importante”, reveló.

Indicó que “es una empresa que genera empleos y sería lamentable que deje de operar una empresa de esta magnitud, porque se quedarían muchas personas sin trabajo”.

Lo que se ha dado a conocer del atraco por parte de las autoridades policiacas y el personal de la Mina Pangea, es que éste se registró el pasado martes 7 de abril a las 04:30 horas, cuando un grupo de ocho delincuentes armados con fusiles, arribaron en dos unidades motrices.

Según las pesquisas, los delincuentes se introdujeron al terreno de la mina por el poblado El Nacimiento, lugar por donde hay solamente una puerta y cerco de alambre, para luego llegar hasta la bóveda donde se iniciaba el último proceso del metal, es decir, la fundición del concentrado de aurífero que contenía aproximadamente 7 mil onzas de oro, plata y cobre, que fueron robados.

La compañía minera estableció que en total el monto de lo robado es de 8.4 millones de dólares en oro.

Agregan que las corporaciones policiacas ya realizan las investigaciones al respecto y cuentan ya con un sospechoso que está siendo investigado.

Según la autoridad, el sospechoso es empleado de la misma empresa minera y los investigadores trabajan en el caso para verificar si existe personal de la mina implicada en el atraco, pero sobre todo si existen personas involucradas dedicadas a la vida delictiva.

Esto, ya que desde un principio una de las líneas de investigación de la autoridad era que posiblemente los delincuentes que operan en la zona de Mocorito, pudieran estar involucrados en este asalto millonario.

Se ventiló que los asaltantes dieron pasos precisos al cometer el atraco, ya que llegaron a la hora en que la bóveda estaba abierta, porque iban a iniciar el proceso de fundición del concentrado de aurífero para separar el oro de los demás metales y elaborar los lingotes de aproximadamente 10 kilos cada uno.

INAUGURACIÓN. De la planta El Gallo 1.

Los agentes investigadores comentaron que los que cometieron el atraco sabían el procedimiento que se desarrollaba en la mina, ya que el proceso de fundición y elaboración de los lingotes terminaría para antes de las 9:00 horas de la mañana del mismo martes y en ese momento se saca el oro ya sea por vía aérea y terrestre en unidades blindadas de protección de valores, procedimiento que se realiza cada 25 o 30 días.

Pese a que en la mina se tiene conexión directa con los cuerpos de seguridad y los mismos jefes policiacos del municipio de Mocorito y Salvador Alvarado, éstos no les dieron aviso de lo sucedido tal vez por desconfianza y el representante de la empresa que se encontraba en esos momentos en Toronto, Canadá, lo hizo directamente a través del Gobernador Mario López Valdez.

El mandatario a su vez alertó al procurador de Justicia del Estado, Marco Antonio Higuera Gómez, quien ordenó a los elementos de la Policía Ministerial del Estado reaccionar de inmediato y que se abocaran a las investigaciones para esclarecer el atraco millonario que ya fue catalogado por los medios de comunicación nacionales e internacionales como el más grande perpetrado al sector minero en la historia de México.

Desde el mismo martes, la compañía minera envió un boletín donde afirmaban que el atraco fue cometido por personas con armas de fuego, que se llevaron aproximadamente 8.4 millones de dólares en oro, y que pese a que la empresa está asegurada contra robos, el seguro no cubre tal cantidad por lo que esto representa una pérdida importante para la minera.