El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) informa que en la primera quincena de agosto de 2016 el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) registró un crecimiento de 0.31 por ciento, así como una tasa de inflación anual de 2.80 por ciento. En el mismo periodo de 2015 los datos fueron de 0.12 por ciento quincenal y de 2.64 por ciento anual.
El índice de precios subyacente[1] presentó un incremento de 0.13 por ciento quincenal y una tasa anual de 2.97 por ciento; por su parte, el índice de precios no subyacente mostró un aumento de 0.90 por ciento quincenal y de 2.26 por ciento anual.
Al interior del índice de precios subyacente, el índice de las mercancías se elevó 0.27 por ciento y el de los servicios 0.01 por ciento.
Finalmente, dentro del índice de precios no subyacente, los precios de los productos agropecuarios subieron 0.07 por ciento y los de los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno 1.44 por ciento.
[1] La inflación subyacente se obtiene eliminando del cálculo del INPC los bienes y servicios cuyos precios son más volátiles, o bien que su proceso de determinación no responde a condiciones de mercado. Así, los grupos que se excluyen en el indicador subyacente son los siguientes: agropecuarios, energéticos y tarifas autorizadas por distintos órdenes de gobierno.