Ajo Blanco/Cuauhtémoc Villegas Durán

Antes de inicia su periodo como gobernador, Carlos Lozano de la Torre, supuestamente, lanzó amenazas personalmente a sus conocidos “el que se meta conmigo se va a morir”. A quien esto escribe constantemente mis compañeros reporteros me han dicho que el gobernante me matará. Las advertencias son cotidianas: “hay que bajarle”.

Para lograr la supuesta pacificación de Aguascalientes, el gobernador supuestamnete, habría mandado asesinar a todos los narcos que no estuvieran alineados con cierto grupo. Eso es amor por la violencia y se podía calificar de genocidio.

Reprimió a #Yosoy123 y al movimiento magisterial y otros. No deja que la gente se manifieste. Tiene pavor, terror, a la verdad que es esta:

El gobierno de Carlos Lozano de la Torre es violento con su población porque en vez de protegerla, la saquea con impuestos y expropiaciones de propiedades que se inventa con el supuesto de “progreso” para entregar esos recursos de manera nepotista a su sobrino Alejandro Díaz Lozano, secretario de Finanzas y a las empresas extranjeras que se instalen el país y de la que se lleva su buena tajada supuestamente, y de paso amigos y familiares se vuelven multimillonarios. No existe transparencia y maneja las cuentas como si fuera dinero personal.

En público le grita y trata de pendeja a su esposa, aventó a una ancianita limosnera afuera del congreso y se enfrentó con una maestra. No tolera a los pobres y humildes. Sólo respeta a quien detente poder y millones y a quien le sirve como los diputados de su congresito que le aprueba su nepotismo y sus cuentas a medias, negras como la noche.

Ha nombrado a su sobrina, la hija del secretario de Gobierno como visitadora de la Comisión Estatal de Derechos Humanos. Es una burla. Es violencia pura. Es un golpe en el rostro de los aguascalenteses.

El gobernador y sus juniors son frecuentes asiduos al puerto de Acapulco y tal vez, por eso les afecta la violencia en aquel estado y al igual que los de la Canaco ya les urge reprimir a los manifestantes enardecidos.

La violencia es del Estado, de sus gobernadores caciques y hacendados, neoliberales y sinvergüenzas, viciosos y pederastas, saqueadores y asesinos y muchas veces narcos. Esos que llenan al estado con policías asesinos y armamentos. Con generales en las corporaciones policíacas, lo que viola los parámetros de la ONU en derechos humanos porque las policías no se deben militarizar como se ha hecho en el estado.

O como dijo John Lennon “los locos son los políticos que lo destruyen todo”: Carlos Lozano es un ejemplo de ello, destruye a su sociedad para favorecer a quien no lo necesita pero cuya ambición no tiene límites y se destruirá lo que le estorbe al gobernador, personas, naturaleza, ideas, medios de comunicación, manifestantes, etc. porque la violencia es de un Estado que ya no tiene razón de ser porque sólo reprime , saquea y asesina por órdenes de los neoliberales fascistas y ruines como el gobernador de Aguascalientes y la clika de gobernadores, alcaldes, y políticos de todos los partidos que con un pesado lastre para el país y lo peor, verdaderos criminales de Estado…