0 6 min 11 años

mochis-encalado

La Policía Municipal “reacciona” con insulsos operativos

Río Doce.- Ahome despertó a una nueva faceta de horror con el hallazgo de cuerpos decapitados, estrangulados y degollados, además de inhumados en forma clandestina.

El largo y ancho del territorio municipal es utilizado por criminales como panteón clandestino, mientras el incipiente y novato gobierno de Arturo Duarte García responde con una campaña publicitaria de su reciclado plan de “orden y respeto”, que busca eliminar polarizados oscuros, castigar a conductores ebrios y evitar que se maneje hablando por celular, entre otras medidas que según el presidente municipal servirán para retomar el control de las calles con un gran costo político.

Una tercia de crímenes sádicos fue descubierta apenas el fin de semana, en un corral cercano al poblado Mayocoba, en la sindicatura de Ahome, dando fin a una agonía de 15 días para tres familias de jóvenes pescadores de El Jitzámuri, que habrían sido privados de la libertad el 29 de enero, al filo de las 6:30 horas.

Rancheros descubrieron los restos humanos y cuando estos fueron desenterrados se descubrió el sadismo con que fueron sacrificados Francisco Gálvez González, de 42 años, Manuel León Ramírez, de 20, e Israel Flores Galaviz, de 39.

Uno de ellos murió decapitado, otro estrangulado y uno más degollado. Todos fueron torturados, según revelan los golpes que presentaron los cuerpos.

Los tres fueron sepultados en fosas clandestinas. Sus cuerpos fueron encalados, lo que evitó la descomposición acelerada, y dio margen a los investigadores forenses para determinar las circunstancias del triple asesinato.

En la víspera de los tres homicidios e inhumación clandestina, un cuarto cuerpo fue encontrado semioculto en el basurón del ejido México, a espaldas de la ciudad de Los Mochis.

Era el cadáver de Alejandro Cuevas Medina. Tenía 25 años al morir y vivía en el fraccionamiento Las Flores, una zona proyectada como residencial pero que en realidad fue abandonada por los constructores generando una gran zona marginal. Alejandro fue privado de la libertad el 1 de febrero, en su casa.

Evaristo Castro Borbolla, subprocurador regional de Justicia del Estado confirmó que no tienen pistas de los asesinos, porque las familias no revelan mayores datos de los hechos, excepto que un grupo armado allanó sus casas y se llevó a los pescadores y al joven, en hechos distintos.

Tampoco tiene un móvil para el triple asesinato, pues lo único que sabe de las víctimas era que trabajaban en el mar como pescadores. Sus antecedentes policiales están limpios.

Incluso, dijo, hay posibilidades de que existan más tumbas clandestinas pues tienen registradas 10 denuncias de personas desaparecidas. Entre ellas estaban las de los tres pescadores que fueron encontrados muertos.

Mientras se desentierran cadáveres por el municipio, principalmente en las sindicaturas Central, Ahome, Higuera de Zaragoza y Heriberto Valdez Romero, y se siembran muertos en tierras de cultivo como en Gustavo Díaz Ordaz (El Carrizo), el alcalde, Arturo Duarte García respondió con el despliegue de una campaña publicitaria de su plan de seguridad municipal, al que pomposamente llamó Estrategia de Prevención, Orden y Respeto.

En ella anunció “enérgicas acciones contra civiles”, entre las que destacan la implementación del alcoholímetro preventivo, la obligación de propietarios de vehículos a contratar cobertura de seguro de daños a terceros; multa a quien maneje hablando por celular o testeando, engomado de los carros de minusválidos, retiro del polarizado oscuro de los autos, el uso forzoso del cinturón de seguridad, y el descuento de multas de tránsito de 2013.

: Los Mochis. Cuerpos encalados.
Los Mochis. Cuerpos encalados.

Con las medidas policiales anunciadas, dijo el alcalde, no dejará de hacer ni dejará pasar violaciones a las normas.

“Con esto se evitará que la comunidad sea una zona de tolerancia, en donde todo se permite. Se pondrá orden y se obligará al respeto a la ley, a la autoridad y al cumplimiento a las normas”.

Gerardo Amarillas Gastélum, director de policía, consideró que las ejecuciones y entierros clandestinos no son alarmantes.

Para el abogado Martín López Félix, la escalada violenta en Ahome no es nueva, pero sí oculta.“Hoy los grupos delictivos no se pasean, no son visibles, pero existen. Las privaciones de la libertad de decenas de personas, los asesinatos a sangre fría con o sin testigos y las tumbas clandestinas, son más que evidencias de que lo hecho hoy es solamente cosmético y superficial”.

Y mientras el alcalde lanza su campaña publicitaria y pide la colaboración ciudadana para atrapar conductores ebrios y hasta multar a quien invada un cajón de estacionamiento para minusválidos, los delincuentes toman la zona rural como su panteón privado, y las calles como su impune teatro de operaciones.