Ríodoce/Miguel Ángel Vega

Igual como ocurrió con otros capos, llegado el día, Estados Unidos dijo y pregonó que cada narcotraficante extraditado que cooperara con ellos tendría que pagar además una gran cantidad de dinero para “compensar” el daño hecho a la sociedad estadounidense.

Así ocurrió con Benjamín Arellano Félix, Vicente Zambada Niebla, Ovidio Limón Sánchez, Osiel Cárdenas Guillén, entre muchos otros que, de ser sus grandes enemigos y “envenenadores” de sus ciudadanos, terminaron convirtiéndose en sus aliados.

Las cantidades que aparentemente les decomisarían oscilaban entre los 80 millones de dólares que supuestamente pagó Vicente Zambada Niebla, hasta los 200 millones en propiedades que los fiscales dijeron que le decomisarían a Benjamín Arellano Félix, o los 100 millones que “le quitarían” a Osiel Cárdenas.

Con Ismael, el Mayo Zambada los números se salieron de control, pues la multa era brutal, ya que pretenden decomisar 15 mil millones de dólares, equivalente a casi 280 mil millones de pesos mexicanos.

No obstante, abogados y fiscales cuestionados sobre esas multas, señalaron que son una gran farsa, pues escrito en el papel, el decomiso suena contundente y real, y al tratarse de un documento oficial, la gente lo cree, pero la realidad es que rara vez quitan un peso a un capo.

Eduardo Balarezo, quien en su momento defendió a narcotraficantes como Alfredo Beltrán Leyva, el Mochomo, y posteriormente representó a Joaquín, el Chapo Guzmán, dijo que, efectivamente, la corte ordena el decomiso de propiedades y dinero que equivalga a la cantidad que el narcotraficante debe de entregar, pero nunca aclaran al público que eso sólo ocurre cuando encuentran una propiedad a nombre del imputado, o bien, cuentas a su nombre.

“Si la persona no entrega dinero, y si no tiene propiedades en los Estados Unidos, probablemente nunca tendrán un centavo de esas cantidades y todo se vuelve una ficción”, dijo el abogado, entrevistado vía telefónica.

Un fiscal del Departamento de justicia (USDOJ), y quien habló con este semanario bajo la condición de no revelar su identidad, coincidió en que la intención de cada acusación es, efectivamente, cobrar o decomisar propiedades y dinero a narcotraficantes que colaboran con el gobierno de ese país, pero debido a que nunca encuentran propiedades a su nombre, como tampoco hay cuentas bancarias que pongan a nombre de ellos, resulta imposible decomisarles algún tipo de bien, aunque sea un poco de dinero.

“Hay un vacío en la ley que no contempla esa parte, que los criminales raramente tienen propiedades a su nombre y menos dinero en bancos, y eso hace que decomisarles bienes, dinero o propiedades, sea una fantasía, porque todo el tiempo tienen el dinero a nombre de otras personas”, dijo el fiscal.

En el expediente número 09-cr-00466, se lee que los 15 mil millones de dólares son el resultado de una estimación por parte de los fiscales basado en la cantidad de droga que el capo traficó durante más de 50 años y, con base en ello, la corte determina las ganancias que el capo generó en ese tiempo.

Para gente allegada a Zambada García, de 77 años, esa cantidad es, más que ridícula, irrisoria, porque todo mundo sabe que no la tiene.

“Es como cuando dijeron que el Chapo era de los más ricos y poderosos del planeta, y pensar que él tenía ese dinero, era imposible. Ah pues, pasa lo mismo con el señor”, dijo un viejo colaborador de Zambada García.

Una situación similar habría ocurrido con el caso de Joaquín Guzmán Loera, a quien el gobierno de Estados Unidos pretendía decomisarle 12 mil millones de dólares, aun cuando no cooperó con los fiscales sino que decidió enfrentar a la fiscalía durante el llamado juicio del siglo.

La presidenta se acomoda

Claudia Sheinbaum Pardo, presidenta de México, explicó que, en caso de que Zambada García logre pagar los 15 mil millones de dólares, debe haber una compensación para México.

“Entonces ya veríamos las condiciones legales en caso de que hubiera devolución de recursos, pero eso ya lo veríamos si se paga esa deuda”, explicó la presidenta.

Pam Bondi, fiscal general de los Estados Unidos, observó a su vez que de momento Estados Unidos, está viendo cómo cobran la multa a Zambada García, y una vez que determinen los pasos que deben de tomar, empezarán a tomar medidas.

“Creo que lo más importante es que, este tipo, el Mayo, vivía como un rey y ahora vivirá como un criminal el resto de su vida. Porque vivía en un palacio, pero ya no será el caso”, observó.

Balarezo, que ha pasado más tiempo en los juzgados que la fiscal de Estados Unidos, reiteró que es casi un hecho que los fiscales se queden con las ganas, y no cobren un solo centavo.

El Mayo se declara culpable y admite sobornos a policías, militares y políticos

En la audiencia celebrada el lunes 25 de agosto en la Corte del Distrito Este de Nueva York, Zambada García se declaró culpable de conspiración de crimen organizado y de dirigir una empresa criminal continua durante 50 años, tiempo durante el cual “sobornó a policías, militares y políticos”.

Ante el juez Brian Cogan, el capo de 77 años narró en siete minutos, que comenzó su vida criminal en 1969, traficando mariguana, y entre 1980 y 2024 creó “una red criminal que yo dirigí, llamada el Cártel de Sinaloa”, a través de la cual se expandió hacia el tráfico de otras drogas como la heroína y cocaína, y que de esta última transportó un millón 500 mil kilogramos hacia EU.

“Durante 50 años he dirigido una gran red criminal… Desde el principio y hasta el momento de mi captura he pagado sobornos a policías, militares y políticos en México que nos permitieron operar libremente”, dijo el Mayo en español.

El juez federal Brian Cogan le preguntó a Zambada García: “¿Cómo se declara?”.

“Culpable”, respondió el capo sinaloense.

El líder delincuencial reconoció el daño que le ha hecho a la sociedad de México y Estados Unidos, y pidió perdón por sus acciones.

“Reconozco el enorme daño que las drogas ilegales le han causado a personas en Estados Unidos y México (…) Me disculpo por todo eso y asumo la responsabilidad de mis actos”.

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Cogan fijó para el 13 de enero de 2026, la audiencia en donde se le dictará la sentencia, que podría alcanzar cadena perpetua.

Al término de la audiencia, Frank Pérez, abogado del Mayo, afirmó que su cliente no estaba cooperando con las autoridades estadounidenses y que no incriminará a nadie.

“Todo eso que dijo ya está en otros juicios, solo dijo lo que era necesario. Él no va a hablar de nadie”, informó Pérez.

“La información del Mayo Zambada se queda con el Mayo Zambada”, puntualizó.

El abogado también hizo público un mensaje de su cliente, en el que pide a los sinaloenses evitar la violencia.

“Mi cliente… hace un pedido a la población de Sinaloa para que mantenga la calma, actúe con moderación y evite la violencia”, mencionó.

“El derramamiento de sangre no sirve para nada, sólo profundiza las heridas y prolonga el sufrimiento. Insta a su comunidad a mirar hacia la paz y la estabilidad para el futuro del estado”, señaló.

En Sinaloa, Ismael Zambada Sicairos, el Mayito Flaco, hijo del Mayo y los hijos del Chapo, Iván Archivaldo y Alfredo Guzmán Salazar mantienen una pugna por el control de los territorios desde el pasado 9 de septiembre, que ha dejado miles de asesinatos y desapariciones, y graves afectaciones económicas.

Artículo publicado el 31 de agosto de 2025 en la edición 1179 del semanario Ríodoce.