Descarta intervención militar de Estados Unidos en México
Sheinbaum presume logros en Michoacán mientras persiste violencia
De igual modo, Sheinbaum señaló que su gobierno se reúne con funcionarios de Estados Unidos para atender los temas pendientes.

La mayor parte de la actividad de Sheinbaum en Palacio Nacional estuvo centrada en las medidas para contener la violencia en Michoacán.
Sheinbaum debió responder, sin embargo, preguntas acerca de la reacción de su gobierno a las amenazas de Donald Trump.
Los Ángeles Press
La actividad de este miércoles 10 de diciembre en Palacio Nacional estuvo centrada una vez más en la celebración de los logros que, según el gobierno de Claudia Sheinbaum, han acumulado a lo largo del primer mes de operación del Plan Michoacán, la respuesta de su gobierno a la violencia en esa entidad.
A preguntas concretas sobre lo dicho por Donald Trump acerca de intervenir militarmente en México, Sheinbaum insistió en que “hay muchas cosas en las que no estamos de acuerdo”, además de decir que “no necesitamos responder a cada declaración de Trump.
Hacia el final de la actividad, Sheinbaum insistió en las críticas que suele hacer a las redadas que impulsa el gobierno de Trump. Según dijo, su gobierno ha enviado “notas diplomáticas” para mejorar el trato a las personas migrantes.
Según Sheinbaum esas notas que su gobierno le envía al de Trump insisten en que la economía de Estados Unidos no sería lo que es sin los migrantes mexicanos.
El problema, sin embargo, es que la realidad concreta de las personas mexicanas en Estados Unidos no se resuelve con esas notas. Ni siquiera la de quienes son funcionarios de alto nivel del gobierno de Estados Unidos pero “se ven como mexicanos”.
Quizás Sheinbaum no se ha enterado de la manera en que Adelita Grijalva, nieta de mexicanos, representante de Arizona en el congreso de Estados Unidos fue confundida en uno de esos operativos y fue víctima de violencia real, no una fabricación para fines de propaganda por cometer el error de “verse mexicana”.
Sheinbaum anunció, en ese sentido, que continúan las conversaciones con Trump y que se busca un acuerdo en materia de agua para evitar la más reciente amenaza de un cinco por ciento adicional de aranceles a los productos mexicanos si no se liquida la deuda que se tiene con Estados Unidos.

De igual modo, Sheinbaum defendió la decisión de mover los vuelos de carga al Aeropuerto Felipe Ángeles y expresó su confianza de llegar a un acuerdo con el gobierno de Estados Unidos que se niega a reconocer al AIFA como un aeropuerto que esté en la Ciudad de México, pues las distancias y la falta de una red adecuada de transporte público hace imposible defender esa idea.
Plan Michoacán
En lo que hace al Plan Michoacán, si uno creyera en lo que se dijo hoy en Palacio Nacional, ya no habría problema alguno luego de que el gobierno federal se vio obligado a intervenir la entidad luego del asesinato de Carlos Manzo, entonces alcalde de Uruapan, en los primeros días de noviembre.
El problema, desde luego, es que este tipo de intervenciones, incluso cuando son de gran escala, difícilmente resuelven problemas de fondo que han existido en las regiones afectadas por la violencia en las últimas décadas.
Basta ver lo que ha ocurrido en Sinaloa desde que el gobierno del entonces presidente de Estados Unidos, Joe Biden, logró la captura de Ismael El Mayo Zambada.
No sólo se desató una de las peores olas de violencia en la historia de Sinaloa, que ya antes las ha vivido, sino que otros problemas sociales se han agravado. Basta ver la manera en que se duplicaron de 2024 a 2025 los feminicidios cuando todavía le quedan algunos días a 2025.
No es claro qué movió de manera tan dramática la cifra de ese crimen en particular, pero es una de las realidades que el gobierno de Rubén Rocha Moya en Sinaloa, así como el de Sheinbaum a escala federal han sido incapaces de explicar y de resolver.
Ello sin olvidar que las balaceras, así como otras formas de violencia siguen siendo frecuentes en aquella entidad, por lo que hablar de éxitos sólo podría hacerse cuando haya pasado más tiempo y se calibre si, en efecto, se sostienen.
Porque en Sinaloa la intervención federal de mayor escala lleva ya más de un año y los problemas siguen, sin olvidar que se han agregado otros problemas asociados con la gestión del agua que son más severos en Sinaloa por las características propias de su economía, fuertemente asociada a la producción agropecuaria, que necesita del agua para operar.
En todo caso, en Palacio Nacional Rosa los siete funcionarios del gobierno federal que acompañaron a Sheinbaum se elogiaron a ellos mismos y a su superior por lo que han hecho en Michoacán en las últimas cuatro semanas.
Estuvieron presente Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Gobernación; Ariadna Montiel, secretaria del Bienestar; Mario Delgado, secretario de Educación; Carlos Torres, secretario técnico del Gabinete de Sheinbaum; María Luisa Albores, directora general de Alimentación para el Bienestar; Alma Herrera, rectora de la Universidad Nacional Rosario Castellanos, así como Abraham Carro, director del Instituto Mexicano de la Juventud.
Según la lógica del gobierno de Sheinbaum, el problema se resolverá en la medida que se convenza a los jóvenes de que conviene más dedicarse a estudiar en lugar de asociarse a las organizaciones criminales que los reclutan.
El problema de ese modelo es que, si uno le cree a Andrés Manuel López Obrador y lo que él decía sobre sus propios programas en materia de atención a la juventud, eso ya se viene haciendo en México desde 2018, es decir, se acumulan ya siete años de un modelo que no prueba que en los hechos se generen las soluciones que convenzan a los jóvenes de tomar esa decisión.
El modelo se ha ampliado. A las universidades Benito Juárez que creó López Obrador, se han agregado ahora la Universidad Nacional Rosario Castellanos, pero el problema permanece.
Y lo más grave es que no hay mecanismos de evaluación de muchos de los programas. López Obrador logró convencer a la sociedad mexicana que el gobierno federal gastaba mucho en evaluación y ahora esos programas operan sin alguna medida de control de lo que logran.
Sheinbaum y su equipo presentaron como un logro el que se tengan programas para los próximos meses un total de 13 Ferias del Bienestar que apoyarán los programas de “Sí al desarme, sí a la paz”; los llamados “Tianguis del Bienestar”, además de diversas actividades culturales y deportivas, a las que sumaron un programa de alcance federal, el así llamado Salud Casa por Casa que según Montiel, la titular de la secretaría del Bienestar, dio lo que ella misma calificó de “grandes resultados”:
Esos “grandes resultados” en Michoacán se limitan fundamentalmente a la cobertura: 102 municipios con 405 mil 375 viviendas visitadas y tres mil 529 servidores públicos en activo.
En lo que hace a la educación, Delgado, secretario del ramo dijo que la Beca Gertrudis Bocanegra cubre 85 escuelas, con una inversión de 769 millones de pesos y que empezarán a entregar las tarjetas para dispersar el dinero en enero, al tiempo que habló de la ubicación de nuevos planteles para la educación media superior y superior en el estado.

