
Hace un par de días el cielo regaló un fenómeno espectacular: una supercorona lunar.
Este increíble anillo de colores se forma cuando la luz de la Luna atraviesa delgadas nubes con diminutas gotas de agua o cristales de hielo muy uniformes. La luz se difracta (se dobla) y crea este halo iridiscente, como un arcoíris circular en la noche.
No es un efecto ni un filtro: es pura física atmosférica y un toque de magia natural.
La próxima vez que veas una nube tenue pasar frente a la Luna llena, ¡mírala bien! Podrías estar presenciando una corona lunar como esta.
