Naasón Joaquín García, líder de la Iglesia de la Luz del Mundo en una en la Corte Superior del condado de Los Ángeles, julio 15 de 2019. (Al Seib/Los Angeles Times via AP, Pool, File)

Larry Neumeister

La acusación de la fiscalía de Nueva York se suma a las condenas que ya enfrenta Naasón Joaquín García en California, por las que purga 15 años de prisión.

Los nuevos cargos asumen que Naasón Joaquín García y sus cómplices en la cúpula de la Luz del Mundo conspiraron para traficar a sus fieles con el fin de explotarlos sexualmente.

Por Larry Neumeister

NUEVA YORK (AP) — Naasón Joaquín García, líder de la Iglesia de la Luz del Mundo, una iglesia evangélica Mexicana, quien purga una condena de más de 16 años en una prisión de California por abusar sexualmente de jóvenes fieles de esa organización religiosa, fue señalado formalmente por el fiscal del Distrito del Sur de Nueva York con cargos de conspirar para traficar con fines de explotación sexual para supuestamente victimizar a fieles de esa denominación durante décadas, según informaron las autoridades este miércoles.

Un Gran Jurado de Nueva York reconoció que hay elementos para acusar de manera formal a Naasón Joaquín García, de 56 años y a cinco cómplices por haber explotado durante décadas a los miembros de la Luz del Mundo para facilitar el abuso sexual sistemático de menores y mujeres para satisfacer sexualmente a Joaquín García y su padre Samuel Joaquín Flores, quien falleció en 2014.

La hoja de cargos recién anunciada señala que las acciones criminales incluían producir materiales fotográficos y en vídeo de actos de abuso sexual de menores.

Joaquín García se encuentra desde el miércoles en la mañana bajo custodia federal en la prisión de Chino, California, donde purga una condena de más de 16 años luego de declararse culpable de dos cargos de abuso sexual en 2022.

Sus abogados no respondieron de inmediato a la solicitud de comentarios de su parte.

Joaquín García es el líder de la Iglesia de La Luz del Mundo, que dice tener cinco millones de miembros a escala global. Sus seguidores lo consideran a él “apóstol” de Jesucristo mismo.

Los fiscales de California señalaron que usó su influencia en el plano espiritual para tener relaciones sexuales con niñas y mujeres jóvenes, a quienes decía que las llevaría a su salvación o a su condena si se negaban a satisfacerlo.

Además de Joaquín García, un coacusado se encuentra en custodia de autoridades en Los Ángeles y a otro se le arrestó en Chicago. Otros tres se encuentran libres aun.

Según la acusación formal, dos de los acusados y otros trataron de destruir evidencia y evitar que las víctimas de abuso sexual ofrecieran su testimonio al hablar con las autoridades luego del arresto de Joaquín García en 2019.

Se estipula que presionaban a las víctimas a firmar declaraciones fabricadas en las que negaban que hubiera ocurrido el abuso, redactaron y distribuyeron sermones en los que se decía que todas las que decían ser víctimas de abuso sexual mentían e insistían en la doctrina de esa iglesia según la cual poner en duda la palabra del “apóstol” es un pecado punible con la condenación eterna.

En su comunicado, Jay Clayton, el fiscal del Distrito Sur de Nueva York señala que Joaquín García y los otros acusados “abusaban de la fe de sus feligreses para abusar de ellas”.

Agrega que “cuando enfrentaban reclamos, usaban su influencia religiosa y poder económico para intimidar y obligar a las víctimas a permanecer calladas sobre el abuso del que habían sido víctimas”.

Ricky J. Patel, el responsable de la oficina de Nueva York de investigaciones del Departamento de Seguridad Interior dijo que los cargos son fruto de un trabajo de años en todo Estados Unidos y con el apoyo de docenas de valientes “víctimas”.

Traducción y edición de Rodolfo Soriano-Núñez.