El mandatario sinaloense llega a la mitad de su gobierno con una evaluación positiva de su gobierno más reducida, en medio la pugna interna del Cártel de Sinaloa, que él se ha empeñado en minimizar
El gobernador Rubén Rocha Moya llega a la mitad de su sexenio en medio de la peor crisis de seguridad, gobernabilidad y de credibilidad de su administración, agudizada a raíz de la detención de Ismael Zambada García, el asesinato de Héctor Melesio Cuen Ojeda y la sospechosa investigación de la Fiscalía estatal, así como la pugna interna del Cártel de Sinaloa.
A diferencia de sus dos primeros años de gobierno e incluso la primera mitad del actual, donde los pleitos del morenista con alcaldes, Cuen, la UAS, líderes sociales, periodistas y medios críticos, parecían no afectar su imagen pública, ya que se mantuvo entre los diez gobernadores mejor evaluados y con la mejor percepción ciudadana, ahora, de acuerdo a diversas encuestadoras, la crisis de violencia y el manejo gubernamental de la misma, lo mandaron hasta el sótano.
En el ranking más reciente de Mitofsky de septiembre, Rocha Moya ya no se encuentra entre los primeros tres gobernadores mejor evaluados, como ocurrió en 2022 y 2023, ni siquiera entre los primeros 10, donde se mantuvo hasta junio pasado, sino que cayó hasta el lugar 22, con una aprobación ciudadana de 50.4 por ciento. La mejor evaluación fue para el panista Mauricio Vila, gobernador de Yucatán, quien obtuvo una aceptación del 60 por ciento.
El 10 de agosto, el Mayo Zambada a través de su abogado Frank Pérez difundió una carta en la que aseguró que presuntamente el día de su secuestro y detención el 25 de julio pasado, en una finca de Huertos del Pedregal, en Culiacán, fue citado a una reunión en la que estarían Joaquín Guzmán López, Cuen y Rocha. El mandatario sinaloense dijo que lo habían “engañado” y que ese día él se encontraba en Los Ángeles. Su viaje, dijo, fue en un avión prestado por el empresario Jesús Vizcarra.
La noticia fue replicada en medios nacionales e internacionales. La aprobación del gobernador estatal comenzó entonces a caer; ese mes, de acuerdo a Mitofsky se ubicó en la posición 13 con un 50.9 por ciento de aprobación, para septiembre, cuando ya había iniciado la pugna entre Chapos y Mayos, la caída fue de nueve posiciones.
Arias Consultores, en el ranking de octubre de este año, situó a Rocha en el lugar 30, con una aprobación de 9.7 por ciento, y donde el gobernador de Puebla, Sergio Salomón Céspedes, fue el mejor evaluado con un 49.1 por ciento. En la encuesta realizada entre el 26 y 30 de octubre se pidió a los participantes calificar al mandatario en términos de aprobación, credibilidad, percepción de seguridad, entre otros ejes de gobierno. En agosto, el sinaloense ocupó el lugar 15, con una aprobación de 32.6 por ciento. En octubre de 2023 estuvo en la quinta posición, con una aprobación de su gobierno de 58.80 por ciento.
Demoscopia Digital, ubicó a Rocha en su última encuesta de octubre en el lugar 25, con una aprobación ciudadana de 36.2 por ciento, y CEResearch, en su ranking de noviembre del desempeño de gobernadores, lo ubicó en el último lugar entre todos los gobernadores del país, por debajo incluso de nueve mandatarios de oposición a la 4T, con el 40.14 por ciento de aprobación ciudadana.
Al impacto negativo en la imagen del gobierno de Rocha, influyeron además de las afirmaciones del Mayo y el viaje de Rocha a EU el mismo día de la detención del capo, el escándalo del crimen de Cuen. Ismael Zambada afirmó en su carta que este ocurrió a la misma hora y lugar donde él fue secuestrado por el hijo del Chapo Guzmán, y no como afirmaba la Fiscalía General del Estado, que la muerte había derivado de un intento de despojo de la camioneta en la que viajaba el exrector de la UAS y líder del PAS, la noche del 25 de julio, en una gasolinera del poblado de La Presita.
A lo anterior se sumó el descrédito de la Fiscalía estatal por la investigación del asesinato de Cuen, que llevó a la salida voluntaria de la fiscal Sara Bruna Quiñónez Estrada. La FGR, que atrajo el caso acusó irregularidades en la indagatoria, calificó de montaje el video del supuesto intento de robo de vehículo, llamó a declarar al personal involucrado y anunció que solicitaría órdenes de aprehensión en su contra. Rocha además tuvo que comprobar su viaje a EU. En medio de los cuestionamientos el presidente Andrés Manuel López Obrador respaldó a Rocha.
A lo anterior se sumaron las críticas por la designación de la sucesora de la Fiscal. De una terna enviada por Rocha el Congreso eligió a la entonces vicefiscal zona Centro, Claudia Zulema Sánchez Kondo, quien estaba en funciones durante la investigación del crimen de Cuen.
Las noticias sobre Sinaloa, Mayo y Cuen se replicaban en medios nacionales e internacionales. Periodistas y articulistas publicaban diferentes versiones sobre lo ocurrido y pusieron en duda el viaje del mandatario sinaloense, quien hizo pública en una conferencia semanera su bitácora a Los Ángeles en un avión de Jesús Vizcarra, dueño de SuKarne, y quien fue vinculado al Mayo Zambada, y responsabilizó al periodista Luis Chaparro de su seguridad. Eso le valió diversos pronunciamientos de organismos defensores de periodistas.
Mientras el tema Mayo-Cuen-Rocha seguía aún vigente en medios, el 9 de septiembre inició en Culiacán la pugna entre Mayos y Chapos, que actualmente se ha extendido a Eldorado, Navolato, Elota y San Ignacio, principalmente, y recientemente a Mazatlán, generando otra nueva crisis al gobierno estatal.
La información tardía, el minimizar los hechos violentos en el discurso y a través de comunicados oficiales como un video de Rocha en una caminata en el Parque Las Riberas o una fotografía donde se le ve sonriente durante la inauguración del Festival Cultural Sinaloa, mientras la población se refugiaba en sus casas, las escuelas en clases presenciales ante la negativa de padres de familia de mandar a sus hijos a las escuelas y casi la totalidad de la actividad económica paralizada, le valieron a Rocha múltiples críticas de diversos sectores de la sociedad.
Una vez que rindió protesta, el respaldo de Claudia Sheinbaum a Rocha, ha sido más moderado.
Para contrarrestar la imagen negativa del mandatario, que incluso se hizo popular por la frase “¿Y el Rocha?”, debido a sus viajes a la Ciudad de México o a otros municipios, cuando en Culiacán seguían los hechos violentos, llevó al gobierno estatal a contratar un despacho de asesores, que comenzó una nueva estrategia de comunicación, que incluyó información a través de redes más oportuna sobre actos violentos, comunicados diarios tanto de la Fiscalía como la Secretaría de Seguridad Pública, como una conferencia diaria sobre el tema de seguridad, presidida por el secretario de Seguridad Pública, Gerardo Mérida Sánchez y el secretario de gobierno, Feliciano Castro. En ellas no han faltado también las críticas sobre las declaraciones donde uno u otro aseguran que la situación se está normalizando.
En busca de respaldo político, Rocha ha realizado diversos viajes a la Ciudad de México, en los que se ha reunido con senadores y funcionarios federales.
Recientemente, un grupo de ciudadanos presentó ante el IEES una solicitud de revocación de mandato para Rubén Rocha. Este dijo que era un asunto político. El Instituto Estatal Electoral del Estado de Sinaloa consideró que el recurso era retroactivo y no lo avaló, y el gobernador solicitó que fuera admitida. De nueva cuenta, la postura de Rocha generó polémica.
En su intento por apagar el fuego narco, el gobernador se reunió la semana pasada con Almirante Raymundo Pedro Morales Ángeles titular de la Secretaría de Marina, el cual se ofreció a brindarle el apoyo necesario. En la reunión estuvo el senador de Morena, Enrique Inzunza Cázarez.
Artículo publicado el 17 de noviembre de 2024 en la edición 1138 del semanario Ríodoce.