En la confrontación entre las facciones de los Mayos y los Chapos, han sido privadas de la libertad 65 personas, en su mayoría jóvenes

Carlos Alberto Pérez Martínez y sus hijos Edwin Alberto Pérez Villegas, de 19 y Carlos Javier, de 4, se encontraban frente a un sushi en la avenida Eldorado, de la colonia La Campiña, muy cerca de Soriana, cuando hombres armados los sorprendieron, sometieron y los subieron a un vehículo. El niño fue liberado en la zona y localizado por personas que pasaban por el lugar.

Trece horas después, el cuerpo de Carlos Alberto fue encontrado en la avenida 21 de Marzo, en la colonia La Costera, al sur de Culiacán, en un tramo de tierra de una calle que comunica la avenida Patria y el libramiento Benito Juárez La Costerita. Estaba envuelto en una cobija roja y tenía golpes en el cuerpo. Dos tatuajes en sus brazos, uno de San Judas Tadeo y otro de la virgen de Guadalupe, ayudaron a su identificación.

Horas antes, una fotografía de él, sentado en el asiento del conductor de un vehículo, mostraba en su brazo derecho el mismo tatuaje de San Judas Tadeo. La imagen era de una ficha de búsqueda, en la que se pedía ayuda para su localización. Una ficha similar de su hijo Edwin Alberto, se compartió en redes sociales desde la noche del miércoles 18 de septiembre, cuando ambos fueron “levantados”. Edwin aún no aparece.

Alrededor de las 6:00 de la tarde, del mismo miércoles, tres hombres que portaban armas largas llegaron a la casa de Juan Carlos Flores Barraza en la colonia 22 de Diciembre, y por la fuerza lo subieron a una camioneta Lincoln color gris y se lo llevaron, sin que hasta el momento se tenga conocimiento de su paradero.

El jueves 19, casi a la misma hora, un vehículo Kia tinto fue localizado abandonado con el motor y las luces encendidas, así como manchas de sangre en su interior, en el bulevar Hacienda de la Mora y calle Hacienda de Almendras, en el fraccionamiento Hacienda de la Mora. El conductor, que fue identificado como Julio César Aispuro González, había desaparecido.

Al día siguiente, el viernes 20, al no localizarlo su familia compartió una ficha de búsqueda de Julio César en redes sociales. Y horas más tarde se informó a través de post, que este había sido encontrado sin vida, sin que la información haya sido confirmada por las autoridades.

Levantones al alza

Desde el 9 de septiembre, que dio inicio la violenta confrontación entre las facciones de los Mayos y los Chapos, teniendo como epicentro Culiacán, los “levantones” se han recrudecido. Las fichas de búsqueda de personas “levantadas” tan solo en la capital del estado, Eldorado y Costa Rica, difundidas por la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas en el Estado de Sinaloa y la Fiscalía General del Estado de Sinaloa, suman 65, pero María Isabel Cruz Bernal, líder de las rastreadoras en Culiacán, da cuenta de más de 80 desapariciones.

Desde el 9 de septiembre y hasta el viernes 20, unos y otros grupos del Cártel de Sinaloa han privado de la libertad a un promedio de cinco personas cada día tan solo en Culiacán y los alrededores, en su mayoría jóvenes menores de 25 años, de acuerdo al cruce de información.

De las 65 personas que cuentan con ficha de búsqueda desde el inicio de la confrontación interna del Cártel de Sinaloa y hasta el viernes pasado, ocho fueron localizadas sin vida, 23 con vida, cuatro fueron reportados como localizados, pero no se especificó si estaban con vida o no y el resto aún no aparecen.

La asociación Sabuesos Guerreras es la que más ha difundido fichas de búsqueda de desaparecidos. En ellas se reportó la desaparición el miércoles 18 de tres empleados de una fábrica de tapaderas ubicada en la colonia 21 de Marzo, al sur de Culiacán. Dos son hermanos: Brandon de Jesús y Daniel Antonio Quintero Medina, de 22 y 27 años, mientras que el tercero es César Rafael Saavedra Hermosillo, de 18 años.

Otro levantón masivo fue el de David Eduardo Martínez Meraz, Antonio Guadalupe Bojórquez Payán y Ezequiel Jasso. Los tres veinteañeros fueron “levantados” por un grupo armado afuera de un domicilio en el Fraccionamiento Prados del Sur. Un video del momento muestra cuando sujetos vestidos de negro los golpean y se los llevan. El primero fue liberado esa misma tarde, el segundo fue hallado asesinado dos días después, junto con dos personas más bajo el puente de la carretera Internacional y La Costerita. Y Ezequiel permanece desaparecido.

Dos empleados de la Japac, Jorge Lara Esparza y Elías Humberto Torres Sánchez, quienes circulaban en un vehículo por el Malecón nuevo la noche del 14 de septiembre, fueron interceptados y privados de la libertad por un grupo armado. Estuvieron desaparecidos hasta el jueves 19, cuando fueron liberados con vida y con golpes en distintas partes del cuerpo.

A los casos ocurridos en Culiacán y Eldorado, se suman 11 más en Mazatlán, Ahome, La Cruz de Elota, Concordia, San Ignacio y El Rosario. En estos cuatro últimos municipios y localidades se extendió la guerra entre las facciones del Cártel de Sinaloa, con balaceras, bloqueos, asesinatos, levantones, quemas de autos y casas.

De las privaciones ilegales de la libertad, en Mazatlán se reportó las de tres empleados de una funeraria que se dirigían a Mazatlán el martes 17. La última comunicación que se tuvo con ellos es cuando se encontraban en el crucero de la localidad de El Llorón. Desde entonces se desconoce su paradero. Alexandro Salvador Malagón Sarmiento, Jorge Omar Chávez Rangel y Juan Martínez Rangel, no han sido localizados.

El boxeador Juan Ariel Salazar Aguilar y su esposa Denisse Estrella Vélez Osuna también fueron reportados desaparecidos el sábado 14, cuando conducían por la carretera Mazatlán-Durango, a la altura del poblado de Malpica, en Concordia. Fue hasta el jueves 19 que su familia reportó que se encontraban sanos y salvos, sin precisar lo ocurrido.

Además de Denisse Estrella Vélez, otras dos mujeres han desaparecido durante la ola de violencia: Palmira Ivette Robles Morales, de 43 años, fue reportada como desaparecida el 17 de septiembre cuando se dirigía al fraccionamiento Benevento, en Culiacán y Dania Maritza Chávez Rodríguez, de 29 años, el 9 de septiembre en el ejido Los Naranjos. La primera ya fue localizada.

El miércoles 18, un video mostró el momento en que presuntamente un grupo armado derribó la puerta de un departamento en la torre Boca de Cielo, ubicada en el Paseo Claussen y posteriormente se llevó sometidos a cinco hombres.

Al día siguiente, el alcalde Édgar González Zataráin y el secretario de Seguridad Pública, Jaime Othoniel Barrón Valdez, señalaron que el caso era investigado por la Fiscalía, pero no confirmaron ni negaron si la privación ilegal de la libertad ocurrió.

Artículo publicado el 22 de septiembre de 2024 en la edición 1130 del semanario Ríodoce.