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El retorno de las familias desplazadas de Nueva Esperanza, municipio de Chenalhó, fue posible gracias al Ejército mexicano que intervino en un operativo. 

De Chenalhó surgió un grupo autodefensa para sumarse a El Machete.

Por Cinthya Alvarado Enríquez/Cortesía: Los Ángeles Press

Regresaron a la comunidad Nueva Esperanza, municipio de Chenalhó, Chiapas, más de 170 familias, unas 500 personas que, hace una semana, tuvieron que salir huyendo debido al enfrentamiento armado entre “Los Herrera” y “El Machete”.

La 31ª Zona Militar activó el plan “BOOM”, en el que colaboraron grupos como la Guardia Nacional, la Policía Estatal y Protección Civil. El retorno se llevó a cabo a las 15:00 horas del viernes 9 de agosto.

Esta noticia concede un respiro de paz y esperanza a la comunidad, que había quedado atrapada entre el fuego cruzado de los grupos paramilitares que se disputan el control. Estos grupos interrumpieron las elecciones extraordinarias que el Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana (IEPC) había organizado, ya que no se lograron llevar a cabo en el período normal el pasado 2 de junio.

Sin embargo, después del conflicto que amenazaba directamente a la comunidad, el tema electoral queda todavía en segundo plano.

Algunos pobladores regresaron en sus propios vehículos desde Chenalhó; otros, procedentes de poblaciones cercanas, fueron transportados en vehículos militares. Esto coincide con el anuncio, mediante videos, de un grupo paramilitar que ese día declaró su creación con el carácter de autodefensa en apoyo al grupo “El Machete”.

En los videos se observan unos 50 encapuchados, armados con equipos tácticos, vestidos de negro con armas largas, y también se vislumbran algunas mujeres. De hecho, quien da el mensaje leyendo un papel y con el rostro cubierto es una mujer.

Luego del operativo Boom y del regreso de las familias, no hay información oficial sobre estos hechos. Se desconoce si lograron desarmar y consignar a los grupos beligerantes, así como si el Ejército permanecerá en la comunidad para garantizar la seguridad de las familias.

 
Retorno de unas 500 personas a Nueva Esperanza, municipio de Chenalhó, Chiapas.