Miembros de la Marina también privaron de la libertad de manera ilegal a dos trabajadores de la CMIT en el municipio de Moloacán.

Entre las personas agredidas, una mujer y un niño de 5 años familiares de los trabajadores de la CMIT.

Cortesía: Los Ángeles Press/Por Juan Ricardo Montoya

VERACRUZ.- El mediodía del miércoles, trabajadores agremiados a la Confederación Mexicana Independiente de Trabajadores (CMIT) fueron reprimidos por elementos de la Secretaría de Marina Armada de México (SEMAR) y de la policía estatal en Villa Cuichapa, municipio de Moloacán, Veracruz, en complicidad con la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM) y la Confederación de Trabajadores de México (CTM).

Según Víctor Pérez Guerrero, Secretario General de la CMIT, durante la represión, los elementos de la SEMAR privaron de su libertad de manera ilegal a dos trabajadores de la CMIT por más de doce horas. En un comunicado, el líder gremial denunció que alrededor de las 12 horas los trabajadores afiliados a su organización se encontraban realizando diversas labores de construcción en el pozo Balamín de Petróleos Mexicanos (Pemex), que está en proceso de perforación.

Pérez Guerrero explicó que PEMEX, mediante una toma de nota, autorizó a la empresa Trasecol, encargada de la obra, a contratar empleados del sindicato de la CMIT, quienes son originarios de la región de Moloacán, Veracruz. No obstante, un grupo de individuos identificados con la CATEM y Pedro Olmos Nochebuena, alias “Borrego” de la CTM, irrumpieron en el lugar de la obra, abrieron los candados del área donde se encuentran las máquinas de construcción y trataron de sacar la maquinaria para trabajar.

Esto provocó que Víctor Pérez Guerrero se dirigiera al representante de la empresa para recordarle que había una toma de nota de PEMEX a favor de la CMIT, y que, aunque las máquinas son de Trasecol, era ilegal que los enviados de CATEM hubieran irrumpido y sacado la maquinaria pesada. 

Pérez Guerrero relató que, mientras esto ocurría, llegó un grupo de elementos de la SEMAR y de la Policía Estatal, supuestamente para mediar y evitar un posible choque entre los trabajadores de ambas centrales obreras. Sin embargo, debido a la negativa de la gente de CATEM de abandonar el lugar, los marinos y policías estatales arremetieron contra los agremiados de la CMIT.

Durante la refriega, hubo disparos contra los miembros de la CMIT, quienes, como se evidenció en varios videos, huyeron para evitar ser asesinados. Dos compañeros, Gabriel Esteban Gómez y Andy De Jesús Esteban Gómez, fueron capturados por marinos y privados de su libertad por más de 12 horas, durante las cuales sus compañeros y familiares desconocieron su paradero. Tras ser salvajemente golpeados, fueron liberados, al igual que Tomás Salomón Gómez, María Eugenia Sánchez Gómez y Gabriel Hernández Domínguez.

Víctor Pérez Guerrero, acompañado de trabajadores, acudió a la Fiscalía General de Justicia de Veracruz para interponer las denuncias correspondientes contra Juan Bautista de la CATEM, Pedro Olmos Nochebuena alias “Borrego” de la CTM, la SEMAR y la Policía Estatal; sin embargo, el agente del Ministerio Público se negó a recibirlas. Se limitó a decirle a Pérez Guerrero que acudiera el viernes para presentar la denuncia, la cual quedó registrada bajo el numeral C-VI-5.

El dirigente de la CMIT en Veracruz indicó que esta es una de varias agresiones que él y sus agremiados han sufrido por parte de Juan Bautista de la CATEM y Pedro Olmos de la CTM. Explicó que el 29 de julio, sin fundamentos, Juan Bautista lo acusó de disparar contra sus propios trabajadores, lo cual considera una vil mentira. Por ello, Pérez Guerrero hizo responsable a Juan Bautista de cualquier daño que pudiera ocurrirle a él, su familia o a cualquier trabajador de la CMIT.

Pérez Guerrero recordó que han sido blanco de ataques con armas de fuego en tres ocasiones: primero, cuando balearon su casa; segundo, el pasado 29 de julio, cuando sus obreros fueron golpeados por un grupo de choque bajo las órdenes de dirigentes de CATEM y CTM en el pozo petrolero, con la intención de desplazarlos para que trabajaran empleados foráneos; y tercero, este miércoles, cuando la Marina arremetió contra ellos, a pesar de que su función debió limitarse a preservar el orden y no disparar contra el pueblo trabajador.

El dirigente enfatizó que la política del presidente Andrés Manuel López Obrador para la pacificación del país ha sido no reprimir al pueblo. Afirmó que el conflicto se deriva de que a la CATEM dirigida por Juan Bautista no le conviene que los lugareños de Moloacán se organicen y obtengan trabajos con sueldos justos. “La CATEM trae gente de otros lugares y actúa como intermediario para el pago de sueldos, que llegan en forma de migajas, ya que se quedan con una parte”, dijo Pérez Guerrero.

Finalmente, Pérez Guerrero afirmó que la Confederación Mexicana Independiente de Trabajadores cuenta con un trabajo serio y de lucha comprobada en favor de los trabajadores en todo el estado de Veracruz.