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Aunque Saúl El Canelo Álvarez intenta eliminar a pequeños y medianos empresarios del transporte para acaparar el mercado en los municipios del sur de de la magalopolis de Guadalajara, que son Tlajomulco, Chapala y El Salto, lo cierto es que no ha podido. En la imagen, decenas de personas esperan la ruta 178 o la 177 por más una hora, ya que pasan llenas y ni siquiera se paran en El Álamo, Tlaquepaque y es que, desde que compró la empresa “El Salto”, el servicio empeoró porque el boxeador sobre explota a los chóferes con jornadas de hasta 20 horas (Los chóferes dicen trabajar de cuatro de la mañana a las 12 de la noche) al día mientras, los pequeños y medianos transportistas dejan descansar a sus trabajadores hasta tres días a la semana con jornadas de ocho a 12 horas y pagos similares de alrededor de mil pesos por turno. En estas rutas es donde, de niño, “El Canelo” vendía paletas de hielo. Foto: Cuauhtémoc Villegas Durán/Objetivo7fotógrafos.