Ajo Blanco/Cuauhtémoc Villegas Durán
El transporte púbico en la ciudad de Aguascalientes es uno de los peores de México y tal vez del mundo, es completamente tercermundista, estamos peor que en Chiapas o Oaxaca: el servicio termina a las ocho de la noche entre semana y en fines de semana. Los domingos empieza hasta las siete de la mañana y termina a las siete de la noche.
Los chóferes cubren todo el horario del la unidad. No existen dos horarios por la ambición desmedida de los dueños de las unidades.
Por las mañanas rutas como la 5 y la 1, dejan cientos de personas sin darles la parada porque los camiones van llenos. Muchos chóferes y ciudadanos no se bañan, repegan los genitales en los hombros de las personas que van sentadas, se empujan, impiden el paso, se echan flatos, no abren la ventanas o los chóferes las soldan, inutilizandolas creando saunas de suciedad humana.
los chóferes siempre van dista+idos con sus esposas, hijos, amigos y amantes -esas que les gusta pagar con cuerpo los viajes- y ya se puso de moda el manos libres entre los cafres por lo que no dejan de hablar durante todo el día con sus amigos, amigas, familiares y compañeros para preguntar sobre la ubicación de la otras unidades mientras se van peleando el pasaje dejando a decenas de personas paradas que prefieren caminar o tomar taxi.
Los sábados y domingos cientos de personas que quedan varadas en el centro por la falta de camiones. Algunos deben caminar kilómetros entre la oscuridad de avenidas y barrios para llegar a sus casas a veces hasta la medianoche y llenos de ampollas en los pies.
Los chóferes, ridículos, toman modas como la de subirse el pantalón en su lado derecho para “manejar mejor# mostrando su flacas, blancas y asquerosas piernas derechas por lo que de nada sirven los uniformes que usan como personajes de Rius: por ningún lado.
El gobernador, ladrón y tercermundista, como es, dice que no afectará a las personas pagar uno o dos pesos más aunque ya se tiene pactado el aumento para febrero lo que llevará un millón de pesos más diariamente a los concesionarios de los camiones y a la empresa ATUSA. Claro al él se le paga la comida que se traga y el vino que lo embrutece a cuenta de la gente que si trabaja, también se le paga la gasolina, chófer y múltiples guaruras por su temor a la muerte. Tiene más guardaespaldas que muchos presidentes europeos y que el propio presidente electo Andrés Manuel López Obrador.
¿De qué va a vivir el ser humano? se pregunta una maestra si derechos laborales. Trabaja en un colegio sin prestaciones y sin derechos laborales. Viaja de raid por la mañanas y en las tardes camina kilómetros para ahorrarse un segundo camión.