Esteban Loaiza, de jugador a traficante
14 agosto, 2018 por Miguel Ángel Vega/Río Doce
Al declararse “culpable”, el beisbolista Esteban Loaiza podría tener una sentencia de entre 10 años y cadena perpetua
El ex lanzador ligamayorista Esteban Antonio Loaiza podría haber agotado toda su suerte el viernes pasado, luego de declararse culpable por los delitos de tráfico de drogas y posesión de 20 kilos de cocaína para su distribución, durante una audiencia en una corte federal del sur de California.
Ahora, el otrora pelotero deberá enfrentar una pena que oscilará entre un mínimo de 10 años en una cárcel federal, hasta cadena perpetua, y la última palabra la tendrá la magistrado Janis L. Sammartino, quien tras escuchar a Loaiza cambiar su declaración de no culpable a culpable, le advirtió si estaba consciente de la gravedad del delito por el cual aceptaba responsabilidad.
“Tuve tiempo de analizar el caso junto con mi abogada, y sí su señoría, me declaro culpable de las acusaciones que hay en mi contra”, reiteró Loaiza, mientras su abogada Janice M. Deaton, se mantenía firme junto a él.
Ante tal respuesta, la magistrado fijó el próximo 2 de noviembre como fecha para dictar sentencia a Loaiza, advirtiendo que una vez que cumpla su encarcelamiento, sea el tiempo que sea, es posible que sea deportado a México, y que autoridades migratorias le revoquen su permiso de residencia temporal, el cual mantiene desde 1995, cuando fue seleccionado por los Piratas de Pittsburg.
“Eso ni siquiera está en discusión, pues este señor será deportado al término de su condena, como ocurre con todos los presidiarios que no son estadounidenses”, enfatizó al término de la audiencia, Jarad Hodes, fiscal del Departamento de Justicia de Estados Unidos (USDOJ), quien presentó los cargos en contra del mexicano.
Loaiza, de 46 años, quien militó con los Tomateros de Culiacán entre 1995 y 2006, enfrentó tres cargos mayores, entre ellos tráfico de droga, posesión de droga para su venta, y por tener la droga a menos de 100 pies de un plantel de educación preescolar.
De acuerdo a información revelada en su momento, el ex lanzador de los Dodgers de Los Ángeles, fue arrestado la mañana del viernes 9 de febrero pasado, luego que un equipo especial del Departamento del Sheriff del condado de San Diego (SDSD), recibiera datos de un informante, que les sugirió que siguieran una camioneta Mercedez Benz 450, modelo 2016, que acababa de cruzar de Tijuana a San Ysidro.
Después de seguir la unidad durante gran parte de la mañana, los agentes observaron que el conductor entró en una zona considerada de “mala muerte”, conocida como Imperial Beach, un suburbio de San Diego que es habitado principalmente por latinos.
En aquel momento no tenían elementos para detenerlo, hasta que el conductor no hizo alto en una esquina, entonces descubrieron que se trataba de Esteban Loaiza, y que la unidad que conducía tenía un compartimiento secreto en el vehículo que sirve para traficar droga, por lo que de inmediato los agentes solicitaron una orden de cateo para registrar su domicilio.
Al llegar a la vivienda, y revisarla, los agentes del Sheriff encontraron una habitación donde había más de 20 kilogramos de cocaína valuados en medio millón de dólares.
Al día siguiente, a Loaiza se le presentaron cargos en una corte estatal del sur de California, y entonces el ligamayorista se declaró inocente.
El semanario Zeta declaró que Loaiza operaba para una célula del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), aunque nada de ello se ventiló durante el juicio, como tampoco se explica en el expediente 3:18-cr-01743-JLS-1.
Tras la audiencia, Loaiza caminó hacia el exterior junto con su abogada, sus padres, hermana y un hijo, sin detenerse a dar ningún tipo de declaración a los medios que cubrieron la audiencia, realizada en una corte federal del centro de San Diego.
No obstante su abogada, Janice Deaton, enfatizó que “su cliente continuará bajo libertad condicional hasta que se le dicte sentencia, el próximo 2 de noviembre”.
Sin embargo, no todo será color de rosa para el deportista, pues mientras se encuentre en libertad deberá permanecer en arresto domiciliario hasta que se le dicte sentencia, no podrá salir del país bajo ninguna circunstancia, y deberá portar un brazalete de GPS para su pronta localización.
Loaiza tuvo su momento de mayor gloria cuando en 2003 abrió el juego de estrellas por la Liga Americana, cuando militaba con los Medias Blancas de Chicago, y ese mismo año quedó segundo en las votaciones del trofeo Cy Young, el máximo galardón que puede ganar un pitcher en grandes ligas.
También militó con los Tomateros de Culiacán, y durante mucho tiempo fue considerado un ídolo local, incluso en 1996 había ganado la Serie del Caribe con el equipo guinda, en Santo Domingo, República Dominicana, cuando junto a Nelson Barrera, Darrell Sherman, JR Phillips y Matt Stark, levantaron el trofeo.
Artículo publicado el 12 de agosto de 2018 en el edición 811 del semanario Ríodoce.