EL OLOR DE LA DERROTA
El rostro de Ricardo Anaya evidencia derrota. En la conferencia de prensa a la cual llegó una hora tarde, contesta apenas unas seis preguntas, y lo hace como sin ganas, sin fuerzas. Cuando escucha a los reporteros se le nota harto, cansado.
Responde a los cuestionamientos como en automático: “vamos ganando y vamos muy bien en la campaña”, “Andrés Manuel está muy preocupado porque estamos subiendo”, “yo respeto a todos los que han decidido no apoyarnos”.
El motivo del restraso en la conferencia de prensa mañanera se debe a la reunión previa que sostuvo con los miembros de su equipo de campaña donde manifestó no estar dispuesto a continuar pues es irremontable la diferencia de millones de votos, siendo una meta inalcanzable e imposible.
FUENTE: EXCELSIOR