Cuauhtémoc Villegas Durán/Ajo Blanco
Mentiroso, ofensivo, grosero, gandalla, corriente, vulgar pero con mucho dinero y poder, el autollamado mejor periodista de México, rompió hoy con su hasta ahora amigo del PAN Aguascalientes, Paulo Martínez López quien lo acusó de atacar al gobernador por que no le da dinero.
Morales es un sicario del periodismo, tal vez el mejor ejemplo en este país del periodismo más bajo: Antes de que este reportero lo juzgará en un vídeo solía hacer suyas “exclusivas” que ya tenían días circulando y en algunos casos de Proceso a quien no le pagaba el servicio de agencia.
Morales negó tener de clientes a municipios pero en una entrevista llamó “mi presi” al alcalde de Jesús María. Morales como siempre haciendo uso de sus influencias y poder hizo los bailes de la feria de Los Chicahuales, la más importante del lugar.
Cuando Morales no pudo con los políticos amenazó con demandar a los medios de comunicación.
Paulo Martínez fue muy malo en su defensa del gobernador del que sólo es un “lambiscón” como bien dijo Morales, un Caballero de Colón, un extremo derechista como el gobierno al que crítica y que ahora extiende su sicariato a Jalisco para seguir volviendose millonario gracias a su falta de ética.