DÁMASO LÓPEZ SERRANO. Final de partida.
Río Doce.- Perdida la guerra contra los hijos de Joaquín, el Chapo Guzmán, Dámaso López Núñez le habría ordenado a su hijo que se entregara a la DEA para salvar la vida. La PGR ya respiraba en su nuca y la sentencia de Los Menores era su peor amenaza.
Dámaso López Núñez habría pedido a su hijo, el Mini Lic, entregarse a Estados Unidos para evitar ser ejecutado, luego que sus principales operadores, o fueron asesinados o se unieron al bando de Ismael el Mayo Zambada, y al quedar éste desprotegido, el Licenciado decidió pactar con el gobierno estadunidense con el afán de salvarle la vida a su hijo, revelaron fuentes familiarizadas con el caso.
Esa habría sido la razón por la cual Dámaso López Serrano el Mini Lic, caminó el jueves de la semana pasada rumbo a la garita de Caléxico, en Mexicali, para entregarse a agentes de la DEA, pues con ello no sólo salvaba la vida, sino además se integraba al programa de testigos protegidos, sería reubicado, y eventualmente testificaría contra altos mandos del Cártel de Sinaloa, incluyendo Joaquín el Chapo Guzmán.
“Irse fue lo mejor que pudo hacer, porque si se quedaba un poco más, iba a acabar tres metros bajo tierra”, observó un colaborador de la facción controlada por Ismael el Mayo Zambada, de quien se dice, fue quien tomó el control de la zona que antes pertenecía a los Dámaso.
De acuerdo a juristas estadunidenses entrevistados por Ríodoce, al entregarse el Mini Lic, su destino quedó definido, pues estando ahora en poder de Estados Unidos, y el hecho que todas las agencias de ese país nieguen su paradero, sugiere que el narcotraficante colaborará con autoridades estadunidenses, aún cuando al momento de su entrega ninguna corte de los Estados Unidos había presentado cargos en su contra.
“No tiene porqué existir una acusación contra él, y si esta persona se entregó es porque va a cooperar, aunque su entrega tal vez tuvo algo que ver con la situación de su padre, que es posible que también esté cooperando con el gobierno”, opinó Eduardo Balarezo, abogado penal en Washington D.C.
La entrega del Mini Lic viene a fortalecer el número de testigos potenciales que en su momento podrían testificar contra Joaquín el Chapo Guzmán, preso en Brooklyn Nueva York, aunque el motivo principal de buscar la protección estadunidense, es salvar la vida.
Manny Medrano, ex fiscal del USDOJ y quien ha participado en casos de alto impacto relacionados con el narcotráfico en México, explicó que cuando un narcotraficante está en peligro de muerte, puede integrarse al programa de Testigos Protegidos, y desde ahí cooperar con la fiscalía para, ya sea revelando información que ayude a desmantelar una organización criminal, o bien para testificar contra otros narcotraficantes.
“Pero son los US Marshals quienes deben de aprobar la petición para que una persona se una al programa de testigos protegidos, y a partir de ahí la persona desaparece, y ya nadie conoce su paradero, ni siquiera su propio abogado”, explicó Medrano, quien fungiera como fiscal contra los acusados por el homicidio de Enrique Camarena.
De ser aprobada por los US Marshals la petición hecha por la DEA, y que el Mini Lic se integre al programa de testigos protegidos, éste desaparecería por siempre de la vida pública, y ni sus amigos más cercanos sabrían de él, pues se le cambiaría de identidad, y se le ubicaría en zonas que son controladas por el gobierno de Estados Unidos.
Historia de una debacle
La caída del Mini Lic comenzó luego del arresto de su padre, Dámaso López Núñez, el Licenciado, aprehendido el pasado 2 de mayo en Ciudad de México.
Antes, el 19 de enero pasado, Joaquín Guzmán Loera fue extraditado a Estados Unidos, y justo entonces los problemas para los Dámaso comenzaron, pues justo entonces empezaron a disputar el control de la facción con los hijos: Iván Archivaldo y Alfredo Guzmán Salazar.
En medio de una guerra que puso a temblar a Sinaloa, el número de homicidios se incrementó notablemente hasta que el Licenciado fue arrestado en la Ciudad de México, y el Mini Lic, quedó entonces completamente desprotegido.
“Entonces daba miedo salir, porque había mucha violencia, pero cuando arrestaron a ese señor (El Licenciado), como a las dos semanas todo se calmó, pues se decía que los operadores del Mini Lic, o los habían matado, o se habían hecho de lado del Mayo Zambada, mientras que él había huido”, explicó un residente de Eldorado, quien solicitó no se revelara su identidad.
Solo, y con la muerte siguiéndole los pasos, López Serrano se mantuvo ocultó en sitios desconocidos, hasta que se parapetó en una casa de seguridad de Mexicali, desde donde sólo mantenía comunicación con los abogados de su padre, preso en el penal Altiplano, en el Estado de México, y quien le habría pedido entregarse, para así evitar la muerte.
Fue por eso que aquel 27 de julio por la mañana, el Mini Lic llegó solo a la garita con Caléxico, y al estar frente al agente de migración e identificarse como Dámaso López Serrano, el agente simplemente lo escoltó a donde varios agentes de la DEA ya lo estaban esperando.
Ni la DEA, ni la Oficina de Migración y Aduanas (CBP), ni los US Marshals, ni el USDOJ, emitieron ningún comentario sobre la detención o el paradero de López Serrano, lo que indirectamente ha confirmado que su integración al Programa de Testigos Protegidos será inminente.
Si los US Marshals aprueban la petición hecha por la DEA, el Mini Lic será reubicado en una zona que sólo el gobierno de Estados Unidos conocerá, se le creará una nueva identidad, y cuando llegue su momento, será llevado a una corte federal para que testifique en contra de personas que conoce o conoció. Mientras tanto su ubicación será un misterio.
“Es lo que ha ocurrido con otros casos como es el caso de Jesús el Rey Zambada, quien ya no aparece en el sistema penitenciario de Estados Unidos, y en el caso de esta persona (El Mini Lic), su juicio será llevado a puertas cerradas, si es que alguna vez ocurre”, consideró Balarezo.
La hegemonía del Cártel de Sinaloa
Luego de la disputa entre los hijos del Chapo Guzmán, y Dámaso López el Licenciado, el Mayo habría ordenado un cese al fuego, incluso, las fuerzas del Mayo estaban listas para ir a pelear a Eldorado, aunque esa orden se detuvo cuando el Licenciado fue arrestado.
Tras esa detención, los más fieles operadores de los Dámaso, o se unieron a él, o fueron muertos a tiros, hasta que, a mediados de mayo, el Mini Lic huyó con destino desconocido. Entonces ya nadie supo su paradero.
Según fuentes consultadas por Ríodoce, quien ahora controla la zona de Eldorado y gran parte del acceso hacia las playas que sirven como puente para el tráfico de droga, son gente allegada a la facción del Mayo Zambada, aunque hay zonas que también son controladas por otras familias, todo con anuencia de los Zambada.
“El viejón lo que quiere es que todo esté tranquilo, nada más eso: que no haya violencia, ni robos de auto, ni robos en general”, dijo el contacto que colabora con la gente del Mayo Zambada, y quien solicitó no se revelara su identidad.
Con López Serrano en poder de Estados Unidos, y la inminente extradición del Licenciado, el USDOJ cuenta con dos testimonios sumamente sólidos para hundir al Chapo Guzmán, si es que estos deciden testificar en su contra, además de tener también en su poder a una de las amantes del capo, la ex diputada Lucero Guadalupe Sánchez, con lo cual el gobierno estadunidense tendría el cuadro completo para enfrentar al otrora capo más poderoso de México.