Ajo Blanco/Cuauhtémoc Villegas Durán
Erase que se era, la historia de un individuo que afectado por el Hubris y la juventud de quien se sabe poderoso tuvo que tumbar un árbol seco sólo a “periodicazos” cuando ciudadanos y su personal sabía que era necesario pero él quería hacer una “obra de arte”.
Son tres los árboles de esta historia, uno que está punto de caerse dentro de una escuela, el que tumbó el viento y el que sólo pudo caer a llamadas de teléfono en la radio.
El árbol que era un peligro serio para los transeúntes y vehículos que conducían sobre la Avenida Manuel Gómez Morín, quienes hicieron la observación a la Secretaría de Servicios Públicos del municipio de Aguascalientes, encabezado por Juan Antonio Martín del Campo Martín del Campo. Invadidos todos los secretarios por la soberbia y desprecio al ciudadano al grado de que Pinita, panista, trabajador del municipio y ahijado de Paquín, tan solo por su físico fue retenido 4 veces por los guardias de seguridad de Palacio Municipal.
Total que pasaron los meses y a pesar de que la gente del municipio le daba la razón a los ciudadanos de que ese árbol debería ser cortado a la brevedad, el señor Héctor Anaya, secretarios de Servicios Públicos se negaba aduciendo que el árbol era para crear una obra de arte.
Siguieron las quejas hasta en la radio hasta que un día un empleado del municipio le contó a una quejosa, respetable señora, que el “jefe” no quería cortar el árbol porque era para una obra de arte, llamó a la radio y contó la historia, molesta y no bajando de “inútil” al joven Anaya.
Al día siguiente al árbol no estaba.
El segundo árbol había caído ya y hasta en los medos salió por la inmensidad de su tamaño. Cayó antes por un remolino. Por eso se hicieron las llamadas de alerta al joven Anaya.
El tercer árbol está dentro de una escuela y está ladeado, a punto de caer como a punto de caer estuvo el secretario sólo sostenido por la alcaldesa que ahora tiene que dirigir Servicios Públicos ¿Por qué repitió Anaya en el cargo?