El secreto del sexo tántrico reside en una serie de técnicas para prolongar el éxtasis sexual y mejorar los niveles de satisfacción, pero vamos a la parte práctica: el foco no está en ti. El Tantra cree que para llegar al clímax de excitación sexual de forma natural, el centro debe ser el interior de tus deseos sexuales. ¿Te apetece probarlo? ¡Te enseñamos las mejores posturas para hacerlo!
1. Mantén el contacto visual con tu pareja
¡Que no te de vergüenza! Miraros mutuamente mientras estáis en la cama puede llevaros a experiencias sexuales de lo más intensas. Uno de las formas más rápidas para aumentar vuestro placer sexual es mirar a tu pareja a los ojos, intentando descifrar qué siente y captando cada detalle que lo hace especial.
Es probable que os de la risa al principio, pero, tranquila, poco a poco os iréis acostumbrando, os concentraréis en vuestros pensamientos y os sentiréis como peces en el agua en esta nueva y satisfactoria experiencia. Puedes incluir este intercambio de miradas en vuestros preliminares, pero especialmente te recomendamos hacerlo en el momento en que alcancéis el orgasmo. Además de sensual, ¡será mágico! Prueba para darle un poco más de intensidad a ese momento con alguna de estas canciones románticas para hacer el amor…
2. Siente cada poro de su piel
Uno de los puntos más importantes del Tantra es explorar la sensualidad de tu pareja mediante el juego y las caricias sobre vuestros cuerpos. El sexo tántrico se centra en sentir el tacto de la otra persona, lo que puede ser la clave para alcanzar el orgasmo. Eso sí, debes estar totalmente concentrada en lo que estás haciendo para que dé resultado: intenta no pensar en otras cosas que no sean el aquí y el ahora con tu pareja.
El mejor de los consejos para practicar sexo tántrico es que te centres en saber qué es lo que quieres de tu pareja y cómo vais a alcanzarlo. Por eso, debes ser consciente de las zonas del cuerpo en las que estás tocando a tu chico pero, lo más importante, tienes que tener clara cuál es tu intención. Para dar un plus de sensualidad a este momento, susúrrale alguna de estas frases o la que se te ocurra. Seguro que os ayuda a conectar muchísimo más.
3. Sé consciente de tus sensaciones
El Tantra no solo mejora la parte física de tus relaciones. Es, sobre todo, un impulso a la experiencia emocional y sensorial: significa que debes saborear, tocar, ver, oler y escuchar.
Es muy importante que tú y tu pareja exploréis las sensaciones que vais creando en el cuerpo del otro y la manera natural en la que reaccionan vuestros sentidos. Es necesario crear para ello una atmósfera relajada, íntima y alcanzar una experiencia sexual a otro nivel. Por ejemplo, podéis vendaros los ojos y abrir un gran abanico de posibilidades para estimular el resto de vuestros sentidos.
También podéis jugar con aceites corporales con olores (recuerda que la canela o la vainilla son afrodisíacos), poniendo música de fondo o introduciendo algo de comida (chocolate, nata, fresas…) para potenciar la experiencia. Aquí tienes unas cuantas recomendaciones…
Sexo con los cinco sentidos: sabores y aromas para disfrutar en la cama
Pintura comestible
Vela de masaje
Gloss de naranja y chocolate
Polvos comestibles de chocolate con avellanas
Perfume de canela con feromonas
Incienso erótico
Polvos comestibles de caramelo
Condones de chocolate
Lubricante de mora
4. Experimenta un orgasmo con todo tu cuerpo
¿Un orgasmo con todo tu cuerpo? Suena extraño pero hay una manera de conseguir que todas las partes de tu cuerpo se exciten. Una de las formas de conseguir este tipo de orgasmo es practicar para construir una energía erótica que os mantenga cerca del clímax y dejar que después se desvanezca poco a poco.
Pero no todo se queda ahí: debes jugar a alcanzar varias veces esa energía cercana al orgasmo y usar tu respiración y el poder de tus impulsos para propagar toda la energía por tu cuerpo. Podéis jugar con esta tensión tanto tiempo como quieras, es una especie de reto para ver cuánto aguantáis.
Puedes mantener a tu pareja en ese punto cercano al orgasmo, por ejemplo, con tus palabras, pero nunca dejes que llegue completamente a él. Cuando finalmente alcancéis el orgasmo, sentirás fuertes y placenteras contracciones en diferentes partes de vuestro cuerpo.
5. Y… ¡Disfruta del viaje!
El sexo tántrico es un medio para llegar al orgasmo de la mejor manera posible. De hecho, el proceso completo requiere que te concentres en el trayecto y dejes de pensar en el final del camino para conseguir un nivel más alto de satisfacción en tu relación. A veces ponemos demasiado énfasis en el resultado final, en alcanzar el orgasmo y, a menudo, descuidamos la diversión y el placer que nos provoca la forma de llegar hasta él.
Si estás continuamente persiguiendo la posibilidad de llegar al clímax, tu chico y tú acabaréis aburridos de hacer las mismas cosas de siempre. Deja un poco de lado el orgasmo y piensa en qué otras partes del sexo os pueden divertir. La clave para conseguirlo es recordarte a ti misma por qué te gusta practicar sexo y qué es lo que esperas de él. Céntrate en ello y experimenta con algo que os haga disfrutar: la intimidad entre los dos, el sexo oral o los besos puede ser un campo de exploración perfecto. Así que, prueba cosas nuevas y el resto vendrá de forma natural. Por ejemplo, si no logras disfrutar al 100% del sexo tántrico, empieza innovando con tu pareja de otra forma, tal vez con estas geniales posturas para practicar sexo por toda la casa.http://www.enfemenino.com/sexualidad/sexo-tantrico-orgasmos-increibles-s1837664.html