Columna: Ándres Villarreal/Río doce
Martín Heredia es el candidato más débil que presenta el PAN en 30 años. Con pocas y pobres credenciales, arranca muy tarde en un proceso que lleva más de un año en marcha. Cierto es que muchos de aquellos acelerados de hace un año están fuera de las boletas y apagados, mientras él aparecerá aunque no fuera ni siquiera prospecto.
Es el más pobre en tres décadas porque no está ni cerca de la personalidad de tractor de Clouthier que arrastraba todo en 1986; carece del tamaño empresarial de Emilio Goicoechea, dos veces candidato; lejos de los hechizos de Heriberto Félix, y más del Malova de 2010 que encantaba a panistas, priistas y perredistas.
Lo que es más, el PAN lleva décadas también en no poder lanzar un candidato de cuna panista, de pedigrí, y ahora se deciden por Heredia con todo y su pasado de traiciones: después de ser Alcalde de Cosalá por el PRI de 1993 a 1995, aceptó la postulación del PRD en el 2000, en el distrito 06, uno de los más extensos en Sinaloa. Pero les dejó la campaña tirada a los perredistas para volver a los brazos del PRI en la campaña de Francisco Labastida. ¿Quién pensaba aquel inicio de milenio y de siglo que el PRI perdería la presidencia?
En 2010 aún era militante del PRI, pero era su despedida, porque se pasó a la campaña de Mario López Valdez —según la ficha curricular que entregó al Congreso federal, fue el coordinador de la campaña de Malova, aunque eso no es exacto, porque el coordinador fue en realidad Gerardo Vargas—. A partir de ahí viene su etapa panista.
Un par de años después era el candidato del PAN en el distrito 08, de Mazatlán, y ganaba el distrito. En la cámara federal tejió las conexiones con el PAN nacional convirtiéndose en vicecoordinador de la bancada, y entonces pensó que podría ser el candidato a la gubernatura, incluso por fuera de los planes de los panistas de Sinaloa que construían el escenario para la Alianza con el PAS y Héctor Cuen como candidato.
Martín Heredia necesita ahora más que la nominación del PAN para ser un contendiente importante a la gubernatura. Así como a Héctor Cuen no le es suficiente el PAS y la UAS, a Heredia le falta un tejido de grandes puntadas adicional al PAN para convertirse en un verdadero contendiente de Quirino Ordaz, quien con todo y lo que se diga, sigue siendo el enemigo a vencer.
Mirilla
(Otra vez Lucero) Hay una parte de la historia de Lucero Sánchez que hasta ahora se soslaya porque no es espectacular ni para capítulo de serie de Telemundo: la vida pública de la joven diputada. Por más de dos años fue miembro de la bancada del PAN, una candidata exitosa en un municipio por siempre priista.
En su vida pública, y no en filtraciones a cuentagotas que envía la SEIDO a algunos medios, se puede explicar una parte de la vida política de un estado como Sinaloa. ¿Qué hizo Lucero Sánchez en más de dos años en el Congreso? ¿Puede una diputada pasarse inadvertida una legislatura completa? ¿De qué le sirve a una organización criminal un escaño en el Congreso?
El caso Lucero Sánchez es una novela de folletín del siglo XIX, publicadas por entregas a los periódicos. La filtración del día, junto con la notificación a la legisladora del proceso que avanza en su contra, es que la vivienda de la casa de la colonia Guadalupe, en Culiacán, de donde se supone que el Chapo se fugó en 2014 para luego ser atrapado en Mazatlán, era de su propiedad.
Pero a su favor otro dato: que la videograbación de su supuesta visita al Altiplano se borró, porque el sistema se reinicia en automático cada 27 días.
Primera cita
(Un aplauso y un reproche) Los maestros se han movilizado en apoyo de los 55 que serían dados de baja por no presentarse a la evaluación magisterial y no acreditar una justificación. Se trata no solo de la defensa de los agremiados, sino de la lucha contra la reforma. Bastaría un solo maestro dado de baja para que la derrota de esa lucha empiece a decretarse.
En las tres protestas de la semana el gobierno respondió con policías resguardando las instalaciones educativas. En Culiacán, un grupo de maestros mostró lo que comúnmente les pasa a los medios en esta clase de protestas. El profesor con el micrófono preguntó si habían llegado los medios, y le respondieron que ya había llegado Ríodoce, y les pidió un aplauso a los presentes para el compañero Alejandro Monjardín. Pero apenas habían pasado algunos minutos, del aplauso los maestros pasaron al reproche, señalando en altavoz que tuvieran cuidado los maestros porque después los medios reportaban destrozos o daños en las instalaciones, aunque éstos no ocurran.
DEATRASALANTE
(50 millones) Al final del gobierno estatal de Jesús Aguilar, consumó una añeja petición de los constructores que exigían la desaparición de la Comisión Constructora de Sinaloa, Cocosin. En el sexenio anterior, Juan Millán la había convertido en gran competidora de los constructores privados, costaba más pero construía más.
Casi siete años después, aún existe maquinaria de aquella Cocosin, y que ahora pretende vender el gobierno estatal para poder reparar las carreteras, porque no tiene presupuesto para eso. (PUNTO)