Empresario asesinado tenía nexos con “El Chapo”

Aguascalientes, México.- Después de haber sido publicado la ejecución del empresario Rafael Martín Mora Mendoza, en el restaurant Applebee’s ubicado en el Centro Comercial Galerías, sale a relucir otra información que podría ser el motivo del lamentable acontecimiento.

Según informamos Mora Mendoza, tenía la empresa Tequila El Viejo Luis, con la que se blanqueaban recursos provenientes del narco tráfico, información que en septiembre del 2013 dio a conocer el Departamento del Tesoro de Estados Unidos y la Oficina de Control de Bienes Extranjeros (OFA).

Al proseguir con la investigación tenemos que los hermanos Esteban y Luis Rodríguez Olivera, quienes eran socios del ejecutado, tenían nexos cercanos con el narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán y según un informe de la DEA Esteban Rodríguez Olivera, era jefe de “Los Güeros” de Tecalitlán, Jalisco, el brazo delictivo más importantes del Cártel de Sinaloa. La DEA tenía información de inteligencia y testimonios de detenidos que incriminaban a “El Güero” o “El Peligros” de la colocación de embarques de alcaloides en la Gran Manzana desde 1996, a través de una empresa de tracto camiones del mexicano americano Gerardo Cantú Lerma alias “El Pina”, residente en Texas. Doce años de impunidad en el negocio de la cocaína, le hicieron a Rodríguez Olivera tener la confianza de hablar vía telefónica con uno de sus distribuidores mayoristas, sin saber que ya colaboraba con las autoridades estadounidenses y que sus teléfonos eran monitoreados por la Agencia Antidrogas. Parte de la conversación: “Ahí le voy a mandar una novia, una colombiana le voy a mandar pa’llá ¿eh?… Rita va pa’llá”, le dijo su contacto desde Nueva York. “Está bien, que aquí la atenderemos, lo que se le ofrezca y…”, respondió Rodríguez. “Y le tengo… le voy a mandar una ropita ahí de… que se está… aquí… usted sabe conmigo”. “Ay, está bien, muchísimas gracias y a ver cuándo… ya que pueda a lo mejor si no baja de donde es su mamá, despuecito necesitamos… le damos una vuelta para saludarlo. Para allá se puede ir”, decía el socio de “El Chapo” en una conversación intervenida el 29 de enero de 2008. Su confianza ante el auricular no sólo proporcionó la evidencia que confirmó sus tratos con narcotraficantes de Nueva York, sino también precipitó su captura en México, la cual tuvo lugar unas semanas después de la detención de Jesús Zambada “El Rey”, otra de las figuras claves de “El Chapo”. La Agencia Federal de Investigación detuvo tanto a “El Rey” como “El Güero” a fines de 2008, pero mientras la captura del primero fue anunciada por ocurrir en el marco de la “Operación Limpieza” contra funcionarios acusados de corrupción, la del segundo se mantuvo en el más absoluto secreto. Hasta el año 2012 en que fue extraditado a Estados Unidos, la PGR publicitó por vez primera el nombre del jefe de “Los Güeritos”. Martínez Olivera es un hombre al que sus estudios de secundaria le alcanzaron para convertirse en uno de los mayores exportadores de cocaína de “El Chapo”. En el mundo legal, se presentaba como un comerciante del agave y ganadero, hacendoso a más no poder, pues declaró que hasta “su tiempo libre lo dedica al trabajo”. Que se sepa, en México nunca tuvo una orden de aprehensión.