13 de septiembre de 2014.-Una doble tormenta solar cargada magnéticamente llegará a la Tierra la noche del jueves y el viernes, por lo que las señales GPS, las comunicaciones de radio y las transmisiones de energía podrían verse interrumpidas, según ha afirmado el Centro de Previsión del Tiempo Espacial NOAA (NWS Space Weather Prediction Center).
Individualmente, las tormentas, conocidas como eyecciones de masa coronal o CME, no justificarían esta especial advertencia, pero su inusual sincronización y la dirección hacia la Tierra ha llevado al NOAA a dar la alerta.
La primera tormenta (una onda de radiación y viento solar) estalló tras una anomalía magnética en una región del sol en la noche del lunes y podría llegar a la Tierra el jueves por la noche, según ha declarado el director del centro, Thomas Berger, en una conferencia telefónica.
En la misma zona solar se produjo una segunda tormenta, todavía más fuerte que la anterior, alrededor de la 1:45 pm EDT / 1745 GMT del miércoles. “No esperamos ningún impacto que no se pueda controlar, pero estamos vigilando estos acontecimientos con mucha atención”, dijo Berger.
Tormentas tan poderosas como las que ahora hacen su camino hacia la Tierra ocurren de 100 a 200 veces durante un ciclo solar, dijo Berger. “El único dato a tener en cuenta es que hemos tenido dos tormentas seguidas y las explosiones podrían estar interactuando en su camino a la Tierra, en la órbita de la Tierra o más allá. Por el momento no lo sabemos”, dijo.
Las partículas solares de alta energía, cargadas magnéticamente podrían golpear el campo magnético de la Tierra e interrumpir algunas comunicaciones de radio y degradar las señales de GPS, dijo la NOAA. Las tormentas también tienen el potencial de afectar las redes de energía del campo eléctrico en las latitudes del norte, que son más susceptibles a las perturbaciones geomagnéticas.
La parte positiva de estas tormentas son las espectaculares auroras boreales que desencadenan, y que serán visibles si los cielos permanecen despejados a lo largo de la parte norte de los Estados Unidos. Las auroras boreales son causadas por partículas solares cargadas eléctricamente que golpean el oxígeno, el nitrógeno y otros gases en la alta atmósfera, creando cortinas de luz por encima del norte magnético del planeta y el polo sur.
(Reuters)