ADN/20min.- La visita este martes al Congreso de los Diputados del presidente de los Estados Unidos Mexicanos, Enrique Peña Nieto, ha servido de pequeño ensayo para la celebración de la semana que viene en la Cámara baja, que acogerá la proclamación del futuro rey Felipe VI ante las Cortes Generales.

Todavía se desconocen buena parte de los detalles de la sesión solemne de la próxima semana, aunque la visita del presidente mexicano ha sido una excelente oportunidad para que los servicios de protocolo de la Cámara baja engrase su maquinaria de cara a la cita histórica.

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Peña Nieto ha llegado al Congreso en un histórico Rolls Royce de Patrimonio Nacional, vehículo utilizado en ocasiones especiales por el rey Juan Carlos, seguido de una larguísima comitiva de vehículos oficiales y de seguridad. Esta vez no se ha abierto la Puerta de los Leones, reservada para días muy señalados como la apertura de las Cortes, visitas reales o jornadas de Puertas Abiertas en la semana de la Constitución, aunque los ujieres y policías nacionales que prestan servicio en el Congreso sí han vestido el preceptivo uniforme de gala.

Se han escuchado los sones de los himnos nacionales de México y España Asimismo, se han escuchado los sones de los himnos nacionales de México y España, a cargo de una banda de la Policía Nacional custodiada por un escuadrón de honor del mismo cuerpo. Se han vuelto a colocar en salas y pasillos las preciadas alfombras de la Real Fábrica de Tapices y en el patio de Floridablanca, lugar de charla y tertulia durante los días normales de actividad parlamentaria, se respiraba el ambiente de las grandes ocasiones. También se ha instalado una escalera auxiliar que ha permitido al presidente mexicano acceder directamente a la tribuna del hemiciclo sin tener que entrar por las puertas laterales. Esa misma escalera, que se retirará esta noche para no impedir el paso durante el pleno de mañana miércoles, se volverá a colocar la semana que viene para que Felipe VI suba a la tribuna del Congreso antes de ser proclamado nuevo rey de España.

Al igual que ha sucedido hoy con el presidente de México, escucharán al nuevo rey los diputados y senadores, algo apretados, eso sí, ya que de los 350 asientos habituales, se pasará a más 600. Los servicios audiovisuales del Congreso y los medios de comunicación acreditados en la Cámara baja también han intensificado hoy su cobertura informativa. Se han colocado cámaras de televisión adicionales en el patio de Floridablanca y en el salón de Pasos Perdidos, y en la tribuna de prensa, situada en uno de los laterales del hemiciclo, los informadores han tenido que buscar sitio para poder seguir la sesión.

Esta misma mañana, los presidentes del Congreso y el Senado, Jesús Posada y Pío García-Escudero, coincidían en que lo esencial de la ceremonia de proclamación del futuro rey es que será un acto solemne y parlamentario ante las Cortes Generales, más allá de que pueda haber más o menos celebraciones en las calles.

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