Aguascalientes, Ags.- El diputado Gilberto Carlos Ornelas se fue la yugular del congreso local:
Aprobaba un dictamen sin ningún sentido, sin ninguna base sólida: el Órgano de Fiscalización del Estado de Aguascalientes, no analizó las cuentas públicas del 2012 a los organismos que jamás justificaron sus desviaciones en 2011.
Más aún, insistió el diputado perredista, sólo un 1.3 por ciento de los dineros manejados por Alejandro Díaz Lozano, el sobrino del gobernador y secretario de Finanzas del gobierno del estado, fueron fiscalizados y, aprobados por el Honorable Congreso de Aguascalientes.