El Gobierno Vasco nombró en la reunión de su Consejo de Gobierno de ayer –adelantada al lunes por el viaje del lehendakari Urkullu a Bruselas– a Ibon Mendibelzua Madariaga nuevo Delegado de Euskadi en México. Con este nombramiento la oficina vasca en este país norteamericano recupera su rango de Delegación, ya que en el organigrama del anterior ejecutivo había pasado a ser una oficina dependiente de la Delegación de Euskadi en Nueva York.
Vitoria-Gasteiz. La noticia del nombramiento ha sido acogida con particular agrado en la república mexicana, puesto que con esta designación la legación vasca en México recupera su anterior rango de Delegación perdida bajo el ejecutivo de Patxi López, quien mantuvo la oficina, pero dependiendo orgánicamente de la Delegación de Euskadi en Nueva York, con competencias sobre Canadá, Estados Unidos y México.
La satisfacción ha sido además doble, puesto que la persona que llega a hacerse cargo de la Delegación en DF –que permanecía vacante desde el cese del anterior delegado, Iñaki Ruiz, que continuó unos meses tras el acceso de Patxi López a la Lehendakaritza– llega con unas excelentes credenciales y la experiencia de haber encabezado anteriormente –bajo el gobierno Ibarretxe– otra delegación de Euskadi, más concretamente la de Bruselas.
Desde México, han recalcado asimismo los importantes lazos familiares que unen al nuevo Delegado de Euskadi con México, país que acogió a su familia materna, que conoció ampliamente el exilio y residió en el país. Su madre, Garbiñe de Madariaga Aguirre, fallecida el pasado año, era sobrina y ahijada del lehendakari José Antonio Aguirre.