No es libre y es el mensaje que ha querido mandar al mundo entero. La esposa del Premio Nobel de la Paz Liu Xiaobo ha podido salir de su casa de Pekín, de manera excepcional, donde lleva dos años y medio recluida, pese a que ni ha sido acusada ni condenada.
La escritora china Liu Xia ha acudido al juicio en el que se juzga a su hermano por un supuesto delito de fraude. Para ella, el proceso es una nueva forma de presión a su entorno.
“Estoy segura de que el arresto de mi hermano está relacionado conmigo. Quieren romperme las piernas, una tras otra, pero tengo que permanecer erguida. No tengo miedo” ha dicho Liu Xia.
Liu Xia se convirtió en un exponente de la democracia y la libertad de expresión tras el encarcelamiento de su marido, en 2009. Liu Xiaobo cumple una pena de 11 años de prisión por incitar a la subversión contra el poder del Estado.
En febrero pasado, más de 140 Premios Nobel pidieron, sin éxito, al Gobierno chino la excarcelación de Liu Xiaobo y el fin del arresto domiciliario de su esposa.