Las violaciones de la “Víbora” Morales, sicario de Tere “Moches” y del cacique Lozano

Sicario favorito de la alcaldesa Tere “Moches” a quien le regala un millón de pesos al mes para que le eche porras a la inútil y desinformada del palacio municipal sin importarle las múltiples violaciones a las leyes de radiodifusión -Cosa que el jefecito de Prensa, Kike Chayotes, de la inútil, no cuestiona- el yuppie José Luis Morales se la pasa dividiendo a la Nación entre “chairos huevones que se levantan a la una de la tarde” y alabanzas a los millonarios ricos que le lavan el dinero al cartel de Sinaloa, muchos de ellos amigos de la alcadesa, prima del narco R1, intocable por la policía municipal-, maldice, dice pendejos a lectores, radioescuchas, panistas, maldice a diario al gobernador porque no le da dinero “ojalá te pudras en el infierno a fuego lento Martín, maldito”, “vamos a mantener a un dictador” en referencia a Evo, “hace falta una limpia -matar personas” mientras su sobrino cuyo único mérito es ser Morales, “he volvido” dice en su programa de radio porque no sabe ni hablar a pesar de ser abogado, claro, de la fascista UAA- pendejea y reta a golpes a radioescuchas y el César Rojo llama mugrosos a los adictos y pide a la gente que los maten al igual que a los ladrones sin que la Secretaría de Gobernación lo multe ni la Fiscalía lo detenga por ser autor intelectual de asesinatos y torturas como la del “Huevo” y decenas más. Todos participan en el Golpe de Estado contra el presidente y éste no le quita su licencia de locutor ni las estaciones de radio que no son su propiedad sino de la Nación, nada le hacen a pesar de violar todas las leyes al respecto, vaya ni siquiera lo multa.

El locutor de marras viola todas estas leyes a diario:

Capítulo Único Del Espectro Radioeléctrico

Sección I Disposiciones Generales

Artículo 54. El espectro radioeléctrico y los recursos orbitales son bienes del dominio público de la Nación, cuya titularidad y administración corresponden al Estado.

Dicha administración se ejercerá por el Instituto en el ejercicio de sus funciones según lo dispuesto por la Constitución, en esta Ley, en los tratados y acuerdos internacionales firmados por México y, en lo aplicable, siguiendo las recomendaciones de la Unión Internacional de Telecomunicaciones y otros organismos internacionales.

La administración incluye la elaboración y aprobación de planes y programas de uso, el establecimiento de las condiciones para la atribución de una banda de frecuencias, el otorgamiento de las concesiones, la supervisión de las emisiones radioeléctricas y la aplicación del régimen de sanciones, sin menoscabo de las atribuciones que corresponden al Ejecutivo Federal.

Al administrar el espectro, el Instituto perseguirá los siguientes objetivos generales en beneficio de los usuarios:

I. La seguridad de la vida;

II. La promoción de la cohesión social, regional o territorial;

III. La competencia efectiva en los mercados convergentes de los sectores de telecomunicaciones y radiodifusión;

IV. El uso eficaz del espectro y su protección;

V. La garantía del espectro necesario para los fines y funciones del Ejecutivo Federal;

VI. La inversión eficiente en infraestructuras, la innovación y el desarrollo de la industria de productos y servicios convergentes;

VII. El fomento de la neutralidad tecnológica, y

VIII. El cumplimiento de lo dispuesto por los artículos 2o., 6o., 7o. y 28 de la Constitución.

Para la atribución de una banda de frecuencias y la concesión del espectro y recursos orbitales, el Instituto se basará en criterios objetivos, transparentes, no discriminatorios y proporcionales.