Foto: Página oficial de Los Legionarios de Cristo.

Ajo Blanco/Cuauhtémoc Villegas Durán

Aguascalientes, México.-

Los niños bien de México están en este bastión de la extrema derecha en reuniones deportivas públicas y secretas donde discuten como derrocar al presidente Andrés Manuel López Obrador a quien odian a muerte mientras los medios locales a su servicio, callan pero festinan la caída de la popularidad del presidente mexicano tras una campaña de desprestigio orquestada por el verdadero dictador de este país: Carlos Salinas de Gortari.

Y es que, desde aquí, una de la Diócesis y estado más fascistas durante la Guerra Cristera se mandaba a sembrar la mentira y el engaño de que los revolucionarios eran comunistas sin Dios, por lo que al grito de Bolcheviques, los sacerdotes encabezaban masacres, violaciones de mujeres y matanzas de niños y familias completas sin que la derecha se escandalizara como si lo hace por salvar la vida de un presidente derrocado.

Los niños bien van y vienen por todo Aguascalientes en caravanas repletas de guaruras armados hasta los dientes.

Periodistas que sin trabajar viajan meses por Europa y hasta Australia con los recursos públicos que reciben en contratos, en chayotes, o, superpagados con en estos exóticos viajes replican fakenews y sedientos de sangre festinan lo que han logrado con sus mentiras y su odio fascista hacía la democracia.

Y es que, al grito de Cristo Rey, panistas, el Opus Dei y Legionarios de Cristo como Fernando Herrera -y su grupo de amiguitas por no mencionar como los alcaldes y el gobernador hacen millonarios a mediocres “periodistas”- dicen que desde este estado caerá el presidente de México y gastan millonadas en libros, conferencias y medios de comunicación para tal fin, mientras criminalizan y discriminan a quienes consideran “comunistas”.