Venezuela no tiene ni para papel de baño

S.ORDUÑA 2013-09-03

La autarquía venezolana hace cada vez más estragos en la economía socialista del país. A pesar de ser el tercer país con mayor cantidad de petróleo, el socialismo bolivariano, antes de Chávez y ahora de Maduro, no tiene ni para papel, ya sea papel higiénico o para imprimir periódicos.

Hasta el momento, tres periódicos han cerrado por este motivo, dos de ellos de gran relevancia como eran el diario Antorcha, y El Sol de Maturín. Como se hace eco el diario venezolano El Tiempo, los diarios más afectados por esta grave crisis de abastecimiento son los diarios regionales. El grito de alarma, aún más si cabe, se ha dado tras un reportaje en Globovisión el pasado sábado, en el que se expresaron las complicaciones a las que tienen que hacer frente los maltrechos medios de comunicación, al no tener acceso al papel de impresión.

Según los datos publicados por Venezuela el pasado 2012, la importación de papel de periódico tenía el estatus de prioritaria, junto con medicamentos y alimentación, al encontrarse en el número uno de la lista de la Comisión de Administración de Divisas (Cadivi), pero las autoridades venezolanas reestructuraron las prioridades del Cadivi, pasando el papel de periódico a segundo plano.

Tal y como explica el gerente de la empresa importadora Dipalca, Digoberto Romer, a Globovision.com, cuando estaba el papel en la lista 1 del Cadivi no se necesitaba un permiso de las autoridades chavistas para importar. Las empresas en la actualidad deben de contar con un Certificado de No Producción Nacional (CNP) para poder acceder al papel importado. “Antes importábamos de manera efectiva, el papel periódico siempre estuvo exento de aranceles, aún con la implementación del Impuesto al Valor Añadido (IVA)”, señaló Romer.

Cada uno de esos certificados tiene unas características y condiciones para acceder a las importaciones de papel, con lo que las empresas dependen del ministerio de Comercio y éste es quien determina las cantidades de importación del producto. Como ejemplo, el gerente de Dipalca expone que su empresa no suministró papel a diez periódicos durante tres meses- de agosto a noviembre- debido a la tardanza del ministerio en darles el ansiado certificado.

La situación en la que está sumida la prensa venezolana desde el pasado agosto, es más angustiosa si cabe que la vivida el pasado año 2012. La tramitación de estos certificados está paralizada dese hace 90 días, con lo que la falta de papel está obligando a los pequeños y medianos diarios a readaptarse, disminuyendo sus tiradas.

Como recalcan desde el sector, la crisis del papel en Venezuela pone en riesgo el empleo de más de 60.000 trabajadores relacionadas con el sector. Rogelio Díaz, portavoz del Bloque de Prensa Regional, critica que las subastas del Sistema Complementario de Administración de Divisas (Sicad) tomen en cuenta diversos sectores, olvidándose de la prensa. “Tendremos todo para la fiesta, regalos, hallacas, whisky, pero no tendremos periódicos”, dijo el gerente.

Periódicos provinciales

Los periódicos de provincia están siendo los más afectados. Como explica Rogelio Díaz, se calcula que los periódicos tienen reservas para no más de 15 días, con lo que el cierre estaría garantizado en el caso de que el la República Bolivariana no tomara cartas en el asunto.

Este martes está prevista la reunión de representantes del Bloque de Prensa Regional, Colegio Nacional de Periodistas y directivos de medios de comunicación impresa, con el objetivo de redactar un documento conjunto para solicitar al gobierno que elimine el odiado Certificado de No Producción Nacional (CNP) que está sepultando a los diarios venezolanos. Y es que el 95% de los periódicos estarían bajo mínimos, según los datos dados por el portavoz del Bloque de Prensa Regional, Rogelio Díaz.

Alternativas

El parche a la crisis del papel en Venezuela estaría, según el vocero, en permitir que las tres grandes importadoras de papel de periódico entren en el país para poder tener acceso a su importación. Además, el Rogelio Díaz critica el acaparamiento de todo el papel por parte de la burocracia venezolana, que sólo consigue agravar el problema. “Pedimos dos mil toneladas y nos dan la mitad, fraccionan lo que podemos adquirir, aun cuando todo es utilizado por empresas en el país”.

En el momento que Maduro elimine los Certificados de No Producción, los importadores podrán solicitar las divisas ante el Cadivi para poder emitir así la orden de compra a su proveedor internacional para realizar el pedido que sea necesario. Pero el portavoz recuerda que sólo el proceso de solicitud del pedido y descarga en las aduanas lleva un mes, con lo que es fundamental que el gobierno venezolano se ponga manos a la obra cuanto antes. Hasta entonces, esta situación no deja de ser un golpe más al derecho a la libertad de expresión y el derecho a la información libre de los venezolanos, recalca Rogelio Díaz.

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